BLACK LIVES MATTER - PINTURA Y ESCULTURA SACRA
SANTA IFIGENIA

28/07/2020


 

 

La Hermandad del Rosario de Ouro Preto, ciudad del estado brasileño de Minas Gerais, fue fundada en 1730 por esclavos y libertos de raza negra. En principio, tuvo su sede en la Parroquia de la Concepción, donde tenía altar propio junto con los de otras cofradías. Con el crecimiento de la ciudad y el aumento de los recursos, la hermandad decidió construir su propia iglesia, dedicada a Nuestra Señora del Rosario, la principal devoción mariana adoptada por los negros, pero con los años la iglesia se hizo más conocida por su otra santa patrona, Santa Ifigenia, princesa etíope nacida en el primer siglo de nuestra era que, según la tradición, fue convertida al cristianismo por el apóstol San Mateo. Ifigenia colaboró enormemente en la cristianización de Etiopía y, obviamente, fue adorada con devoción por todos los cristianos que también tenían orígenes africanos.

La efigie de Santa Ifigenia que nos ocupa pertenece al mencionado templo, cuya construcción comenzó alrededor de 1734, y finalizó unos cincuenta años después de su inicio, hacia 1785. Algunos de los artistas más importantes de la época formaron parte de su construcción, generando un nutrido conjunto de caracteres y estilos distintos. Es el caso de Antonio Francisco Lisboa, el famoso Aleijadinho, y su padre Manuel Francisco Lisboa, así como de Manuel Gomes da Rocha, Francisco Xavier de Brito y Felipe Viera.

La santa carmelita se halla representada vistiendo el hábito de su orden y portando su atributo habitual: una casa rodeada de llamas en alusión al milagro de San Mateo que se le apareció para salvarla, junto con su comunidad de 200 religiosas, del incendio provocado por el despechado Hitarco, quien usurpó el trono tras la muerte del padre de Ifigenia e intentó sin éxito casarse con ella. Es por ello que la santa es abogada contra los incendios y protectora de las moradas. Se la representa con las carnes negras, dado su origen africano, pero sus rasgos son occidentales y no los propios de su tierra, como solía suceder en estos casos.

Por otro lado, las tallas en madera policromada del periodo colonial de Minas Gerais se caracterizan por su elaborada técnica y su rica policromía. Los artistas locales utilizaban también el caolín o arcilla blanca en sustitución del estuco importado con el que, mezclado con cola animal, impermeabilizaban la madera de cara a su posterior aplicación de las pinturas y las hojas de oro o plata con la que decoraban las figuras.

Siguiendo la tradición, la imagen de Santa Ifigenia fue cubierta de láminas de oro para luego ser decorada con las técnicas del estofado y la pintura al pincel. Al oro bruñido le fueron aplicadas capas de diversos colores que, antes de secarse, eran removidas con el instrumental adecuado en las partes correspondientes al diseño de los ropajes. En eso consistía el estofado, y la misma técnica se empleaba en el caso de las tallas plateadas. Motivos florales y geométricos fueron aplicados posteriormente con el pincel.

Esta pieza data del siglo XVIII, época en la que la presencia de los africanos en Brasil era muy importante, lo que transformó el mundo luso-brasileño y dejó para siempre sus marcas culturales en el mismo. Solo en Ouro Preto un tercio de la ciudad estaba formada por población negra relacionada con la cultura afrodescendiente, el sincretismo religioso y el oficio de los negros en la antigua Minas Gerais. Fue entonces cuando se produjo un auge en la producción de santos negros por parte de franciscanos y carmelitas con fines de difusión y conversión entre los esclavos negros enviados desde África a Europa y sus colonias. Hablamos de seres humanos que habían sido arrancados de sus tierras y lanzados a la precariedad y la esclavitud en un territorio inhóspito y desconocido. Con este tipo de cofradías e imágenes de culto la religiosidad católica asumía un papel conciliador entre ambos mundos, lo que, al mismo tiempo, no dejaba de ser un mecanismo de control social.

 

FUENTES

CONCEIÇAO, Nancy Nery da. Religiosidade em Ouro Preto no século XVIII: os signos africanos na igreja de Santa Ifigênia. Entre a norma e o conflito: espaços de negociaçao, USP, São Paulo, 2016, pp. 14, 56 y 70.

DUTRA MORESI, Claudina Maria. "Materiais Usados na Decoração de Esculturas em Madeira Policromada no Período Colonial em Minas Gerais", en Imagem brasileira, nº 1, Belo Horizonte, Centro de Estudos da Imaginária Brasileira, 2001, pp. 79 y 81.

LÓPEZ AÑÓN, Eva María. Arte religioso en el Arciprestazgo de Nemancos (A Coruña). Siglos XVII-XX. Arte mueble, Universidad de Santiago de Compostela, 2007, p. 749.

 

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