RESTAURACIÓN DEL TALLER AVALL PARA RIUDOMS (TARRAGONA)

07/04/2019


 

 

Hoy ha sido bendecida y presentada al público en la Parroquia de Santiago Apóstol del municipio de Riudoms (Tarragona), durante el transcurso de la Misa y Capítulo de la Cofradía de la Purísima Sangre, una obra barroca que se creía desaparecida del escultor y ensamblador Lluís Bonifaç el Viejo (siglo XVII). Han sido los profesionales del Taller Avall, durante los trabajos de recuperación del patrimonio artístico y cultural del referido templo, quienes han descubierto de forma sorprendente una obra perdida en los hechos de 1936. Se trata de la parte posterior del misterio de la Piedad, o Descendimiento como es conocido en Riudoms.

En 1930 se realizó un nuevo paso para la Piedad aprovechando piezas del antiguo paso barroco. Las piezas aprovechadas fueron el frontal, la cruz y la parte posterior. Todo el conjunto fue destruido en 1936 a excepción de la parte posterior y la cruz, cuya ubicación se desconoce actualmente. La parte posterior no solo tenía una función estética, sino también de sujeción de la cruz situada tras la Piedad. Con una riqueza ornamental muy documentada en las obras de Bonifaç y coronada por un angelito, se puede observar como motivo central el paño de la Verónica, símbolo de compasión. La obra es de madera, dorada y policromada.

 

 

El Taller Avall, especializado en conservación y restauración de bienes culturales, tiene su sede en Reus y ya ha llevado a cabo otras restauraciones de gran envergadura en la provincia de Tarragona. Durante el proceso de estudio y catalogación de la pieza, han descubierto, gracias a la colaboración de la parroquia, en especial a Josep Mateu, su rector, el archivero de la Diputación de Tarragona y de Riudoms, que la misma no solo era más antigua de lo que pensaban sino que pertenecía al taller de Luis Bonifaç.

El proceso de restauración por Avall ha consistido en la desinfección y desinsectación, limpieza mecánica en seco, consolidación de todas las partes rotas que podían sufrir riesgo de pérdida, limpieza con agentes químicos y geles solventes para eliminar los barnices opacificados y amarillentos, así como los repintes llevados a cabo a lo largo de los años, rescatando la policromía original de Bonifaç. Finalmente se reintegró la obra puntualmente y se protegió el conjunto con un monómero de hidrocarburo. Para la reintegración se ha llevado a cabo un criterio museístico, discerniendo en todo momento el original de las reintegraciones practicadas.

 

 

Lluís Bonifaç el Viejo -también conocido como "el bisabuelo"- fue un escultor barroco de origen francés, nacido en Marsella hacia 1648-1653, que trabajó mayormente en Barcelona e inició la dinastía de escultores Bonifaç. Dos años después de su matrimonio ya encontramos las primeras muestras de actividad artística en obras documentadas y realizadas de su mano para la ciudad de Barcelona, siendo su último trabajo el retablo de la Magdalena de la Catedral, fechado en 1688. Ello comprende un periodo de 10 años de trabajo, destacando también su activa participación en el intento de restaurar el sistema gremial ("confraries") junto con otros escultores de renombre como Llàtzer Tramulles el Joven, colaborador suyo en algunas obras y responsable de la formación artística de su hijo Lluís Bonifaç i Sastre (Barcelona, 1683 - Valls, 1765), padre de Lluís Bonifaç i Massó (Valls, Tarragona, 1730-1786), el artista más conocido de la saga (ver enlace), y de su hermano Francisco (Valls, Tarragona, 1735 - Tarragona, 1806), también escultor.

La colaboración entre Bonifaç el Viejo y Tramulles se haría patente sobre todo con la posterior instalación de Lluís en la ciudad de Valls (1693), una zona que los Tramulles conocían perfectamente en cuanto que son los autores de gran parte del retablo mayor de San Juan de Valls y otras obras significativas de la ciudad. En 1695 Bonifaç el Viejo volverá a mudarse, este vez en Riudoms donde trabajará junto con Pere Pau Vinyals (escultor y dorador) en dos retablos barrocos: el de la ermita de san Antonio y el de la Mare de Déu del Roser en el templo parroquial de Sant Jaume, ambos destruidos en los disturbios de 1936. El prestigioso escultor pasó el resto de su existencia en Riudoms, siendo enterrado en 1696 en el interior de la iglesia parroquial de Sant Jaume.

 

 

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