LA SEMANA SANTA 2013 A TRAVÉS DE SUS ESCULTORES (Y III)

Fotografías de Alfonso Vidán Díaz. Con información de Sergio Cabaco y Jesús Abades


 

 

Manuel Pineda Calderón

La imagen de María Santísima de la Estrella, titular de la cofradía homónima que procesiona por las calles de Dos Hermanas (Sevilla) el misterio de la Entrada de Jesús en Jerusalén, es obra del escultor e imaginero alcalareño Manuel Pineda Calderón y fue bendecida el 13 de diciembre del año 1959. Entre los años 1964 y 1965 sufrió una restauración por parte de su propio autor.

Al igual que otras de sus Dolorosas, Pineda Calderón muestra un dolor de expresión dulcificada, casi serena, de facciones muy bellas, solo alteradas por el ligero frunce que presentan sus largas y rectas cejas; de tal forma que si desaparecieran las lágrimas y las cejas se relajaran, la expresión de la imagen tornaría, pudiendo ser una bellísima Virgen de Gloria. Las manos muestran los dedos abiertos y suavemente curvados.

(LÓPEZ GUTIÉRREZ, Antonio J. Misterios de Sevilla, Sevilla, 2003, p. 16; GARCÍA GARCÍA, Juan Jorge. El Escultor Manuel Pineda Calderón (1906-1974), Sevilla, 2005, p. 196).

 

 

Luis Álvarez Duarte

La imagen de María Santísima de la O data de 1971, siendo bendecida el 18 de diciembre del mismo año. Fue labrada por el escultor e imaginero sevillano Luis Álvarez Duarte para la Cofradía del Cristo de la Defensión de Jerez de la Frontera, que anteriormente a esta obra había procesionado una Dolorosa de Tomás Chaveli (1955) y otra antigua de gran calidad y autor anónimo, cuyo inconveniente era su reducido tamaño.

La Virgen muestra el ceño muy fruncido para expresar su sufrimiento, labios abiertos y aniñadas facciones que recuerdan las de la Virgen de la Piedad del mismo autor que recibe culto en la localidad gaditana de San Fernando. Posee un gesto de honda tristeza, y con sus manos expresa al espectador una interrogación palpante. Las carnaciones son, en general, nacaradas, con matices sonrosados.

(Con información de www.defension.com)

 

 

Antonio Castillo Lastrucci

La imagen de Nuestra Señora de las Angustias, titular de la Cofradía del Descendimiento de Carmona (Sevilla), data de 1963, siendo una de las últimas creaciones de Antonio Castillo Lastrucci. Ese mismo año el escultor hispalense, especializado a partir de los años 20 del siglo pasado en el campo de la imaginería religiosa, recibió la Orden Civil de Alfonso X el Sabio por sus méritos en el campo de la cultura española.

Se trata de una pieza de taller perteneciente a la última etapa de Castillo, que en 1962 era ya octogenario. Son años en los que su labor supervisora deja paso a una mayor autonomía por parte de sus discípulos; si bien estos se limitan a reproducir las obras más famosas del maestro. En este caso, vista la impronta de la Señora, parece que el modelo a copiar pudo ser la sevillana Virgen del Dulce Nombre, primera Dolorosa de Castillo.

 

 

Alfonso Berraquero

Labrada en 1974 por el escultor e imaginero isleño Alfonso Berraquero en madera policromada de ciprés, si bien no fue bendecida hasta la Cuaresma del año siguiente, María Santísima de la Salud es una Dolorosa de candelero para vestir que mide 167 cm de altura. Muestra la cabeza ligeramente inclinada a la izquierda y la mirada alzada, y posee brazos articulados y pestañas postizas en los párpados superiores.

Titular de la Cofradía del Ecce Homo de San Fernando, es una singular creación mariana de grandes ojos claros y dolor contenido carente de lágrimas. Suele llevar un tocado que deja ver su cabello completamente tallado. Procesiona junto a San Juan Evangelista, imagen también de Berraquero (1984) en actitud de consolar a María. Las partes visibles del santo son también de cedro, siendo el resto del cuerpo de poliéster anatomizado.

(con información de www.doshermanas.com)

 

 

José Paz Vélez

La imagen de María Santísima del Rosario en sus Misterios Dolorosos, titular de la Hermandad del Rosario de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), es obra de José Paz Vélez (1931-2011), escultor sevillano que vivió con intensidad los momentos de la fundación de dicha corporación de penitencia con el encargo de su Dolorosa, de la cual se sentía especialmente orgulloso y solía visitarla cada Domingo de Ramos o en su víspera.

Es una talla de candelero para vestir con el cuerpo inclinado hacia delante, representada en actitud de caminar. Labrada en madera de pino de Flandes y haya blanca, posee pestañas superiores postizas y ojos y cinco lágrimas de cristal. Lleva extendidas las manos hacia delante, con el pañuelo para enjugar su llanto en la derecha y el Santo Rosario del que recibe su advocación en la izquierda.

(con información de http://noticiasrosarioalcala.blogspot.com.es)

 

 

Ignacio López

El conjunto formado por Nuestra Señora del Desconsuelo y San Juan Evangelista, perteneciente a la cofradía jerezana de los Judíos de San Mateo, se bendice el 7 de abril de 1713. Estamos ante una excelente representación de la Sacra Conversación en la Calle de la Amargura. Destaca la conseguida conexión entre ambas tallas, formando un todo indisoluble y acentuando aún más la emotividad y la teatralidad barroca del grupo.

La Virgen sufrió una restauración en 1980 por José Guerra Carretero que supuso una alteración de su policromía, aunque sigue conservando la mayor parte de los rasgos originales de su posible autor. La forma de tallar la barbilla, la boca, las cejas o el entrecejo con rehundimiento, es sello del artista. San Juan es una de las imágenes más delicadas y logradas de la Semana Santa de Jerez debido a su elegancia y acabada técnica.

(http://laesculturabarrocajerezana.wordpress.com)

 

 

Juan Ventura

Esta obra de Juan Antonio González García, apodado Juan Ventura, sustituye a otra Dolorosa que realizara el mismo autor para la cofradía utrerana de la Quinta Angustia. En 1983 se acuerda su advocación con motivo de la beatificación en Sevilla, un año antes, de Santa Ángela de la Cruz por Juan Pablo II. La actual imagen fue bendecida el 25 de febrero de 1996, año en el que dicha hermandad celebró su XXV aniversario fundacional.

Hablamos de Nuestra Señora de los Ángeles en su Soledad, una de las efigies marianas más veneradas del escultor e imaginero de Lora del Río (Sevilla), discípulo del maestro carmonense Francisco Buiza, cuyo inconfundible estilo es perceptible en esta creación provista de juvenil semblante y marcada frontalidad, que pese a las lágrimas que bañan su rostro mantiene una notable entereza en su aflicción.

(con información de www.consejodehermandadesdeutrera.org)

 

 

Anónimo

Resulta difícil establecer una catalogación para la efigie de Nuestra Señora de la Soledad, titular de la Cofradía del Santo Entierro de Dos Hermanas (Sevilla), sobre todo por las numerosas intervenciones sufridas que han dejado huella en su impronta primitiva; destacando la efectuada por Manuel Pineda Calderón (1955). Consta también que fue retocada tras la Guerra Civil por el artista local José Luis Ferrer de Couto (1940).

Ha sido relacionada sin mucho fundamento con el círculo de Cristóbal Ramos (1725-1799). La atribución a Luisa Roldán es de origen popular. Aunque existen documentos que hablan de una imagen de la Virgen de la Soledad en la hermandad a principios del siglo XVII, la actual talla es fechada mayoritariamente por los expertos entre finales de dicha centuria y principios de la siguiente. Ha sido restaurada también por Isbilia (1986).

(con información de www.elsantoentierro.es)

 

 

José Manuel Bonilla Cornejo

Titular de la cofradía del mismo nombre de Sevilla desde sus orígenes en 1932, Nuestra Señora del Sol es una devoción esperancista cuya festividad tiene lugar el 21 de diciembre. La actual imagen es una talla de cedro realizada por Bonilla Cornejo (1989), director artístico de la hermandad, quien la intervino en 2004 para retocar policromía y pátinas, colocarle nuevas pestañas y tapizarle el candelero con tela de brocado de oro.

Procesiona acompañada de San Juan Evangelista (2008) y Santa María Magdalena (2009), ambos titulares de la hermandad y realizados también en madera de cedro por Bonilla Cornejo, que los donó a la corporación. Los dos santos son de vestir, al igual que la Dolorosa, exornada con ráfaga y media luna con el objetivo de recuperar antiguas iconografías sevillanas; San Juan de cuerpo completo y la Magdalena de candelero.

(con información de la Junta de Gobierno publicada en la Revista Informativa de la Hermandad de Nuestra Señora del Sol, año VII, nº 7, Sevilla, diciembre de 2004, p. 9)

 

 

Juan Manuel Miñarro

El 26 de junio de 1982, por prendimiento de la cera encendida en la saya de la Virgen mientras se celebraba un bautizo en el templo de San Agustín, se produce un incendio, el segundo en su historia, en la capilla de la Hermandad de la Borriquita del municipio sevillano de Alcalá de Guadaíra, quedando seriamente dañadas las imágenes titulares, especialmente la de Nuestra Señora de la Oliva, cuya restauración se estimó inviable.

Para sustituirla José María Cerero Solá realizó una nueva Dolorosa que procesionó entre 1983 y 1989. Se decide encargar en 1990 otra a Jesús Curquejo, intervenida por él en 1992 y 1996; sin embargo, al igual que la anterior, no gustó a los cofrades, que reprocharon falta de calidad en ambas. Sería Miñarro quien, en 2001, convenciera con esta obra que evoca la perdida de Santos; de hecho, se la considera una de sus mejores piezas marianas.

(con información de MALLADO, Alberto. "La Borriquita cambiará la Virgen de la Oliva por una nueva talla de Miñarro", noticia publicada en el diario ABC, Sevilla, 04/09/2000, p. 42)

 

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