LAS GLORIAS DE MURILLO (IV)
CRISTO DESPUÉS DE LA FLAGELACIÓN

Sergio Cabaco y Jesús Abades


 

 

Sorprende en la producción del artista lo escaso de los temas de la Pasión de Cristo, eje tantas veces de la devoción católica. Sin que pueda decirse que los ignoró, pues hay algunos hermosos ejemplos de Cristo Crucificado, Ecce Homo y la Dolorosa, lo cierto es que la sensibilidad de Murillo se vuelca mucho más en escenas amables, dando así cuenta de una transformación del gusto devoto general y de un temperamento evidentemente más sereno y amable que el que había sido habitual en la primera mitad del siglo y mantenía, con rigor casi expresionista, su compañero Juan de Valdés Leal.

Otra muestra de la producción pasionista de Murillo es el bellísimo Cristo después de la flagelación, también conocido como Cristo flagelado recogiendo sus vestiduras, penosa tarea que lleva a cabo Jesús ante un par de ángeles que son una curiosísima síntesis de grabados manierísticos. Pintado después de 1665, este óleo sobre lienzo, (113 x 147,3 cm) conservado en el Museo de Bellas Artes de Boston (Estados Unidos), es un perfecto ejemplo de la intensidad alcanzada por Murillo en sus interpretaciones del martirio del Redentor, las cuales no perdieron un ápice del éxtasis místico y la sensual belleza que caracterizaron su pintura religiosa.

Aquí el pintor sevillano se ha centrado exclusivamente en el sufrimiento del Mesías, escogiendo el momento inmediatamente posterior al del tormento, una vez que sus torturadores han abandonado la escena. La imagen de Murillo representa la naturaleza humana de Cristo dentro de su divinidad. El artista lo ha colocado humildemente en el suelo y ha pintado su golpeado cuerpo para que su piel parezca casi radiante, a pesar de las heridas y las llagas. Los ángeles muestran tanto la adoración como la compasión por el Cristo torturado, las emociones que la pintura pretendía despertar en sus espectadores. 

 

FUENTES

Con información del Museo de Bellas Artes de Boston.

PÉREZ SÁNCHEZ, Alfonso Emilio. Murillo, Madrid, 2000, pp. 51-52.

 

Anterior entrega en este

Noticia relacionada en este

 

Volver          Principal

www.lahornacina.com