MAYO MARIANO - LAS ANGUSTIAS DE LA CATEDRAL DE GRANADA

Con información de Juan Jesús López-Guadalupe Muñoz

Es la titular de una de las capillas del espléndido templo catedralicio de Granada. Labrada por Agustín Vera Moreno entre los años 1737 y 1741, recoge los elementos ya configurados en la también marmórea Virgen de las Angustias del Palacio Arzobispal en cuanto al atuendo, cruz pectoral y ángeles plañideros, como bien ha señalado Juan Jesús López-Guadalupe Muñoz, del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Granada, en su obra La Iconografía de la Virgen de las Angustias de Granada en el siglo XVIII.

La imagen del Palacio Arzobispal, labrada por José Risueño de Alconchel (1712), quedó gravemente dañada a consecuencia de un incendio fortuito en 1982. Según López-Guadalupe, se observa con claridad en la pieza catedralicia que sigue sus dictados iconográficos un soporte a modo de ara sobre el que descansa el cuerpo de Cristo muerto, lo que la aparta de la condición de Piedad con el Hijo en su regazo para adentrarse en el modelo de Dolorosa estante con el Yacente sobre una camilla delante de ella. 

Por lo tanto, la condición de divino altar pasa de María a una especie de mesa rectangular donde se muestra al fiel el cadáver del Redentor tras el sacrificio. Continuadora a su vez del modelo instituido en la Patrona de Granada, las Angustias de Vera Moreno, venerada en un retablo de mármoles rojos de José Bada que fue trascoro de la Catedral hasta 1926, viste con colores negro y hueso, y presenta un modelado similar en su semblante al del simulacro atribuido a Gaspar Becerra, al tiempo que extiende las manos en señal de exhibición del maltrecho cuerpo de Jesús.

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