EL ANTIGUO EGIPTO - LA ESTATUA DE SENWOSRET I

Sergio Cabaco y Jesús Abades


 

 
 

 

Senwosret I, llamado Sesostris por los griegos, fue un dinámico monarca que subió al trono después de haberlo compartido diez años con su padre, Amenhotep I. El faraón luchó contra los libios y los nubios, y construyó un buen número de grandes templos. Los textos literarios más antiguos que se conocen se escribieron en su corte.

Su exquisita estatua en piedra caliza, que mide 194 cm y se conserva en el Museo Egipcio de El Cairo, obedece a una corriente realista que estuvo vigente durante un periodo del Imperio Medio, incluyendo la XII dinastía a la que pertenecía el faraón. Junto con el majestuoso halo de divinidad y fortaleza heredado de las grandes estatuas del Imperio Antiguo, caso de la esculpida en diorita que representa al faraón Kefrén, se intuye un deseo terrenal de reflejar el paso del tiempo en el cuerpo de Senwosret I, lo que se observa en unas facciones levemente vencidas y en cierta flaccidez del torso y el abdomen del rey.

Asimismo, el simulacro muestra la esquematización de formas que sería usual en las esculturas de la época. Ello obedece a un afán de simplificar la anatomía en aras de un mayor tratamiento de rostro, manos y pies, que no obstante también resulta esquemático y que, con el paso del tiempo, daría lugar a la estatua-cubo, formada por un cuerpo de forma cúbica del que emergen la cabeza, las manos y, en ocasiones, los pies del retratado.

 

Fotografía de Giraudon

 

Volver          Principal

www.lahornacina.com