La restauración ha sido practicada en el retablo de la Purísima y el Crucifijo de la capilla de los Conchillos en la Catedral de Tarazona (Zaragoza). El objetivo de esta intervención por parte de la empresa Uffizzi. Conservación y Restauración de Bienes Culturales ha sido la preservación del bien y su puesta en valor.

El retablo data de 1535 y es obra de Juan Moreto, con policromía y dorado realizados, un año más tarde, por Prudencio de Lapuente y Antón de Plasencia. El comitente fue Jaime Conchillos, obispo de Lérida, ya que la capilla había sido elegida como panteón familiar, y en ella están enterrados, en sendos sepulcros de alabastro, los deanes Gonzalo y Lope Conchillos, hermano y tío del prelado, respectivamente.

El técnico responsable de la restauración ha sido Olga Cantos, del Servicio de Conservación y Restauración de Obras de Arte, Patrimonio Arqueológico y Etnográfico (Área de Intervención en Bienes Muebles). Este proyecto encargado a la empresa Uffizzi ha supuesto una inversión de 143.356,45 euros.

En una primera fase, tras documentar la obra, se realizaron un examen patológico, mapas sinópticos y un estudio analítico de la policromía. Para solucionar los problemas estructurales desde el anverso y el reverso del retablo se desmontaron la mesa de altar, el sotabanco y la predela. Una vez fijados los dorados y la pintura, se micro aspiraron las partículas no adheridas.

La observación amplificada y con lámpara de ultravioleta de los recubrimientos, la caracterización de las superficies y la realización de pruebas preliminares, permitieron establecer los protocolos para llevar a cabo la limpieza físico-química del retablo: aplicación de geles de disolventes y sistemas acuosos en emulsión, avalados en los estudios de laboratorio.

La última fase de la restauración ha comprendido la reintegración de la policromía, empleando productos compatibles y técnicas ilusionistas, para finalizar con el barnizado del conjunto con resinas de bajo peso molecular. En el soporte de madera se ha realizado la desinsectación y consolidación, así como trabajos de carpintería estructural, especialmente necesarios en la trasera del retablo.