Busto de Dolorosa, en terracota y telas encoladas sobre peana dorada y marmolizada, con destino a una colección privada de Úbeda. Se trata del modelo, recompuesto y modificado, que el artista cordobés llevó a cabo para la Dolorosa del Amor en madera para vestir (imágenes inferiores), encargada por el mismo propietario.

La aplicación del pan de oro ha sido realizada por el dorador cordobés Rafael Barón, las ornamentos de las esquinas han corrido a cargo del tallista sevillano Juan Manuel Pérez y las piezas de orfebrería corresponden al también cordobés Daniel Porras; al respecto, debemos indicar que una de ellas se encuentra todavía en fase de ejecución, concretamente un corazón en plata que lleva la Virgen en las manos.

El busto muestra rasgos más estilizados y carnaciones más pálidas que el candelero, cuyo aspecto es exuberante y atezado. Otras diferencias se encuentran en los ojos, más rasgados en este caso, y en la carencia de lágrimas. La mayor coincidencia está en la cabellera, cuyos retorcidos mechones descienden sobre el hombro derecho.