Tras estos tiempos de zozobra el Museo Nacional de Escultura (Colegio de San Gregorio. Calle Cadenas de San Gregorio, Valladolid) presenta a partir de hoy cinco obras últimamente incorporadas a su colección, nuevas arribadas que afianzan su labor fundamental, la protección del patrimonio cultural de todos los ciudadanos complementada con su puesta en valor al servicio de la comunidad.

Con estas distintas miradas el Museo Nacional de Escultura ensancha y contextualiza parte de sus colecciones, colmatando algunas lagunas producto de sus propios avatares históricos a lo largo del tiempo, dando así mejor voz y mayor presencia a dos escuelas fundamentales de la escultura barroca española: la andaluza, con obras destacadas de tres de sus más altos exponentes: Juan de Mesa, Pedro de Mena (imagen superior) y Luisa Roldán (imágenes inferiores), y la levantina, con una singular creación de Francisco Salzillo.

Todos ellos son creadores que, en opinión del Museo Nacional de Escultura, en algún momento de la historia fueron olvidados o minusvalorados bien por desconocimiento, bien por injustas comparaciones; no obstante, gracias al esfuerzo de muchos investigadores a lo largo de la historia, ha sido posible reubicarlos en su justo lugar entre los más originales autores representativos de dichas escuelas.

Bajo el título Nuevas obras, distintas miradas, las cinco piezas se presentan en el espacio llamado "Rincón rojo" del museo, junto a la sala 14. Son mostradas al público visitante en el estado en que se encontraban en el momento de su adquisición, evidenciando dos de ellas la labor activa y necesaria que la institución ha de abordar referente a su conservación y restauración, que más adelante nos permitirá reencontrarlas en las condiciones óptimas para su perduración y disfrute.

El subdirector del Museo, Manuel Arias, y el conservador Miguel Ángel Marcos, han sido los encargados de presentar esta muestra que permanecerá abierta al público hasta el próximo 25 de octubre.

La iconografía de la Inmaculada Concepción es el tema tratado por Juan de Mesa (imagen inferior), Pedro de Mena y Francisco Salzillo, mientras que de Luisa Roldán -la primera y única escultora representada en las colecciones de este centro- se han adquirido dos pequeñas terracotas (ver enlace) que representan a La Virgen con el Niño y San Juanito y a la Virgen de Atocha, un relieve enmarcado por múltiples cabezas de querubines que está inspirado en un grabado de la popular imagen madrileña.

Tres de las obras corresponden a las compras realizadas en 2019 por el Estado para el Museo Nacional de Escultura, y procedentes del mercado del arte: la Virgen con el Niño de Luisa Roldán, y las Inmaculadas de Juan de Mesa y Pedro de Mena. Las dos restantes, la Inmaculada de Salzillo y el relieve de Luisa Roldán, fueron adquiridas en los años 2015 y 2017 respectivamente.

En este sentido, el importante esfuerzo realizado por las administraciones públicas resulta esencial para los museos. No solo contribuye a la ampliación de sus fondos, sino que permite su apertura a artistas, géneros y materiales escasamente representados, al tiempo que demuestra que la colección estable de estas instituciones, su "caja negra", está siempre por hacerse.

El horario en el que podrán ser visitadas las piezas es de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 19:30 horas (martes a sábado); domingos solo mañanas, y el lunes el Museo Nacional de Escultura permanece cerrado al público.

¿Qué criterios definen la política de incremento de fondos del Museo Nacional de Escultura? ¿Cuáles son los principales criterios y formas de adquisición de obras por parte del Estado, y los recursos jurídicos y administrativos empleados en su compra? ¿Qué se esconde detrás de los circuitos comerciales? Estas son las líneas de debate de la mesa redonda "El museo sin fin". Tendrá lugar en septiembre y correrá a cargo de Carlos González-Barandiarán (secretario de la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de bienes del Patrimonio Histórico Español) y Manuel Arias, jefe del Área de Colecciones del Museo Nacional de Escultura.