Hablamos, en primer lugar, de una ráfaga de plata, pieza sorpresa que se ha incorporado gracias a los devotos de la Virgen del Carmen. Cincelada por Orfebrería Triana, en la persona de Juan Borrero, en colaboración con Orfebrería Villarreal. El diseño, obra de Juan Dobado y Sergio Cornejo, pertenece al estilo rococó, con cartelas de rocalla y llamativos rayos flameantes que van a dar un singular movimiento a la ráfaga.

Se trata de una singular obra que se ha llevado casi ocho kilos de plata. Su corte es novedoso por tener forma ligeramente acampanada y abierta en la parte inferior para dar cabida a las vistas de la capa que a continuación comentaremos. Es original porque lleva las doce estrellas por dentro, y las cartelas no sólo incluyen símbolos de la letanías, sino también elementos carmelitanos como el Escapulario, Estrella del Mar, etcétera.

La pieza queda rematada con el escudo de la Orden y el Espíritu Santo en forma de paloma. La parte trasera también esta cincelada en plata en gran parte con una guirnalda de hojas y flores que tapan la estructura metálica, con tres cartelas que incluyen inscripciones alusivas a su ejecución.

Respecto a la capa o manto de salida de la Virgen del Carmen, este año se concluye totalmente el bordado, realizado en el taller de la cordobesa Mercedes Castro. Ha sido llevado a cabo en oro fino con diversas técnicas, entre las que destaca la hojilla, cartulina, realce, etcétera. Dos años de trabajo para ver realizada este bella obra en estilo rococó, ya que es la época de la imagen y de la que conserva algunos ejemplos en su ajuar. El diseño corresponde también a Juan Dobado.

Predomina en la capa de salida la rocalla, palmas, conchas, etcétera. Todo un repertorio del estilo rococó, que se completa con aves flores y hojarasca. Lleva los escudos de los Carmelitas Descalzos y el NODO de la ciudad de Sevilla, y cartelas con los bustos en plata de Santa Teresa y San Juan de la Cruz. En la parte trasera destaca especialmente el gran escudo del Carmelo Descalzo y la cartela central con la fuente de Elías, en el Monte Carmelo, también cincelada en plata. Fuente que indica el lugar donde nace la Orden y la advocación universal del Carmen. Las piezas en plata son obra del orfebre y joyero cordobés Antonio Cuadrado.

Sin embargo, la mejor de las aportaciones de los devotos de la Virgen del Carmen es la construcción del Santuario del Carmen y Santa Teresita en Bukavu que los Carmelitas Descalzos tienen en el corazón de África, concretamente en la República Democrática del Congo.

El sacerdote Miguel Gutiérrez nos escribe que, gracias a los donativos de los devotos del Carmen del Santo Ángel y de la revista Miriam, se va a concluir la obra de dicho santuario. Este es el estreno más importante que va a tener la Virgen del Carmen del Santo Ángel de Sevilla: una casa para sus hijos africanos.