Tras un largo periodo de restauración, el templo barroco de San Luis de los Franceses se abre como espacio escénico para la XIX edición de la Bienal de Flamenco de Sevilla, que se celebrará entre el 8 de septiembre y el 2 de octubre del presente año 2016. Después, hasta diciembre, el Conjunto Monumental será abierto a visitas concertadas de entidades fundamentalmente relacionadas con el patrimonio y la cultura para, a partir de ahí, abrir las puertas de San Luis a las visitas de los sevillanos.

San Luis de los Franceses fue construido entre 1699 y 1731 y es el máximo exponente del Barroco seicentista en Sevilla y del Barroco más interesante en toda Europa. La rehabilitación de este antiguo noviciado jesuita ha supuesto una inversión de 4,8 millones de euros y pone a disposición de la ciudadanía, por primera vez, algo más que la Iglesia de San Luis, todo un conjunto monumental, de 2.200 metros cuadrados, que incluye también la Capilla Doméstica y la Cripta, además de distintos espacios de conexiones y patios interiores. 

La Iglesia de San Luis de los Franceses se une por tanto como espacio oficial a la Bienal de Flamenco, acogiendo citas tan íntimas y especiales como los "DIA´LOGOS de viejos y nuevos sones", de la cantaora Rocío Márquez y el violagambista Fahmi Alqhai, y a otros artistas de diversas procedencias, estilos y generaciones como son Dolores Agujetas, Diego Villegas, Juana la Tobala, Laura Vital, Jesús Guerrero, Perico el Pañero, Rycardo Moreno, Ezequiel Benítez, María Terremoto, Manuel Cuevas, Jaime Heredia "El Parrón", Antonio Moreno, Rafael de Utrera, Juan Requena o Manuel Moneo.

La Bienal y la Diputación de Sevilla unen así fuerzas para llevar esta edición a la provincia y traer el arte flamenco de sus pueblos a la Bienal. Esta colaboración continuada, que se afianza en 2016 gracias al trabajo conjunto, toma cuerpo principalmente a través de dos vías distintas: la novedad de contar con la Iglesia de San Luis de los Franceses como espacio Bienal y la inclusión de espectáculos que traerán el saber flamenco de los pueblos de la provincia a la programación oficial de esta cita y viceversa: la Bienal irá a los pueblos.

El eje sobre el que pivotan los contenidos que la Diputación aporta a esta Bienal es la idea de intercambio, de ida y vuelta, que tanto mestizaje ha aportado al flamenco provincial, así como la combinación de artistas de trayectoria de solera junto a jóvenes valores. La gran novedad es la toma de contacto con el pulso de la otra Sevilla, una Bienal que sale a la provincia y que recibe al flamenco de sus pueblos.

Volviendo a la intervención, comentar que la Diputación de Sevilla ha invertido un total de 3,6 millones de euros en la restauración del Conjunto Monumental de San Luis de los Franceses, fruto de la colaboración con el Ministerio de Fomento. Además, ha aportado 840.000 euros para otras intervenciones de carácter más funcional, acometidas a través de los planes Supera II y Supera III, y otros 145.000 euros, procedentes del presupuesto de la Diputación, para financiar las actuaciones finales para la apertura al público del Conjunto y la iluminación funcional y de las zonas anexas que conectan las estancias artísticas del mismo.

Por otra parte, la Fundación Sevillana Endesa ha financiado, con 200.000 euros, la iluminación artística, tanto de la Iglesia como de la Capilla Doméstica y la Cripta, con más de 60 puntos de luz de tecnología led, que combinan la belleza ornamental y la eficiencia energética, ya que suponen un ahorro un 70% del consumo de energía. En el interior de la Iglesia se han iluminado los altares mayor y menor del templo, los frescos de la entrada principal, el coro, el órgano, la cúpula y la logia. Además, estas fuentes de luz de última generación cuentan con una larga vida de funcionamiento, lo que aminora los costes de mantenimiento, al prolongar los tiempos de sustitución de las lámparas.

La actuación sobre los altares, decorados con un gran conjunto de reliquias de santos, enmarcadas en flores secas, se basa en la iluminación difusa de los retablos, mientras se realzan los elementos de detalle, como las imágenes y los relicarios. En los frescos de la entrada, lo que se ha hecho es una iluminación superficial de los frescos y de la bóveda. En cuanto al coro y al órgano, la actuación ha sido la de realizar una iluminación de ambiente, bastante liviana, que permita tocar el instrumento, pero que no resalte en exceso esta zona con respecto al resto de la Iglesia. En la logia, la actuación lumínica tiene una doble finalidad: proporcionar una iluminación ambiental de entrada a la Iglesia y realzar los distintos elementos que forman parte de la misma. Por último, en la cúpula, se ha realizado también una iluminación difusa, tanto de la bóveda como de las pinturas que rodean las vidrieras y tribunas, alcanzando los puntos más altos y, sobre todo, se ha realzado el cénit de la bóveda con respecto al resto del conjunto. Además, para crear una iluminación de ambiente, se han instalado proyectores led en las tribunas, tras las celosías, que orientados hacia el suelo de la estancia generan una iluminación ambiental cálida, agradable y de gran belleza.  

Las primeras acciones de rehabilitación sobre el Conjunto se remontan a 1988. A partir de aquí, la Diputación de Sevilla ha llevado a cabo en San Luis de los Franceses un ambicioso proyecto de restauración, en dos vertientes: recuperación de sus bienes muebles, con una actuación sobre el retablo de San Luis Gonzaga y el proyecto de intervención para el conjunto de los retablos restantes de la Iglesia en espera de financiación, y la intervención arquitectónica, en cinco fases: la primera sobre la fachada; la segunda sobre las torres gemelas; la tercera sobre la cúpula; la cuarta, sobre las cubiertas. La quinta es la restauración, fruto de un convenio de cofinanciación firmado en su momento con el Ministerio de Fomento, dirigida por el arquitecto conservacionista Fernando Mendoza, ejecutada entre los años 2010 y 2012. El objeto de la restauración fue, en la Iglesia, acciones orientadas a acondicionar la cripta, consolidar la logia, mejorar los ornamentos de Iglesia y coro, restaurar el órgano y recuperar la carpintería artística; en la Capilla Doméstica, eliminar humedades y grietas, renovar la cubierta, reparar la sacristía, restaurar las pinturas murales y retablos, y reponer la solería y el zócalo.

Entre los años 2014 y 2016 se realizó el conjunto de actuaciones complementarias. Se trataba ya de obras de apoyo a las acciones de rehabilitación, mejora de la infraestructura y adecuación de los espacios, financiadas a por la Diputación, a través de los mencionados Planes Supera II y Supera III y del Presupuesto propio de la Institución Provincial. Dentro de este paquete de intervenciones, destacan obras menores de apoyo a la infraestructura de la iluminación artística y la propia iluminación funcional, por una parte; por otra, intervenciones de infraestructura: reparación de cubiertas inclinadas y planas o azoteas, montera de cristal, y saneamiento de patios y cornisas. Por último, adecuación de los espacios de conexiones entre la Iglesia, la Capilla Doméstica y la Cripta para su apertura al público, dotación de tres núcleos de aseos públicos, eliminación de barreras arquitectónicas en aras de la accesibilidad, dispositivos contra incendios, etcétera.