NUEVAS OBRAS DE JUAN MIGUEL MARTÍN MENA

Con información del autor (03/03/2024)


 

 

Portada para el boletín MEDIATRIX de la Hermandad del Cachorro (Sevilla)

La obra está realizada en técnica mixta (grafito, bolígrafo y acrílico) sobre papel encolado a tabla. Para la imagen del Cristo de la Expiración (Cachorro) el autor se ha apoyado en una magnífica fotografía de Antonio Jaén Sánchez.

Se trata de una composición que busca sumergir al espectador en un estado de reflexión espiritual sobre el instante supremo de la muerte, la agónica exhalación, el último aliento... mil formas se despliegan para contemplar y analizar el momento en que el Cachorro de Ruiz Gijón se nos revela.

Retratos, pinturas, fotografías e interpretaciones capturan ese segundo suspendido, ese umbral eterno que separa la vida de la muerte. Un cuerpo que agoniza como humano, mas se eleva como divino. Un rostro marcado por el sufrimiento, pero con la mirada llena de esperanza de un Dios que regresa a su hogar.

Dirijamos nuestra mirada más allá de la pasión. Descubramos esa fina capa que separa lo que acostumbramos a mirar a lo que nunca vemos. Sumerjámonos en el misterio de lo que está por acontecer en ese único segundo en el que se encuentra el Cachorro, y que se repite cada vez que lo contemplamos y nunca ocurre, nunca llega a pasar.

Es el segundo antes de la entrega total, el momento supremo del sacrificio. Es el misterio de su muerte. Cristo se dispone a ofrendar su cuerpo y su sangre, el pan y el vino sobre el altar. Y qué mejor altar que la cruz. 

 

 

Cartel conmemorativo del XXV aniversario de la Hermandad del Rocío de Arcos de la Frontera (Cádiz) como Filial de la Hermandad Matriz de Almonte

El autor lo ha titulado "Filia tam optimae Matris" ("Hija de tan buena Madre"). Con una técnica mixta sobre papel encolado a tabla, se recrea una composición asimétrica que evoca la esencia de la romería. En ángulos opuestos, dos ángeles portan los instrumentos típicos de la misma: la flauta y el tamboril. Uno de ellos mira fijamente al espectador sobre un pilar arquitectónico, que simboliza la firmeza y la consolidación de la hermandad a lo largo de estos 25 años. El otro aparece entre la hierba y las flores silvestres del camino, aportando un estilo bucólico a la obra y recordándonos la belleza y la naturaleza que rodea la peregrinación rociera.

Imitando un paño de azulejería de la Iglesia de San Francisco de Arcos se puede leer: "Hermandad de Nuestra Señora del Rocío De Arcos de la Frontera. 25 años del título de hermandad filial de la Matriz de Almonte".

En el centro de la composición, el simpecado se alza como una aparición, con la figura luminosa de la Virgen del Rocío destacando sobre los tonos fríos de la obra. Su diseño es tan emblemático que Martín Mena ha optado por resaltar únicamente los detalles de sus bordados. Al dejarlo exento de fondo, parece suspendido en el aire, una representación simbólica de cómo el amor se eleva hacia lo divino por encima de todo. Es un homenaje a la esencia pura y sagrada que representa la devoción a la Virgen del Rocío.

El efecto anterior deja entrever un gran ventanal abierto en segundo plano, con un cielo nocturno que aporta misterio y elegancia y hace destacar aún más el simpecado, invitando a la reflexión.

 

 

Cartel de la Semana Santa 2024 de Bolaños de Calatrava (Ciudad Real)

Realizado en técnica mixta (grafito, acuarela bolígrafo y acrílico) sobre papel de algodón encolado a tabla (100 x 70 cm). La inspiración compositiva y la paleta de colores remiten a la cartelería clásica de la década de 1930, de estética vibrante y arriesgada como la obra de Juan Miguel Sánchez, quien describía la Semana Santa con gran fuerza visual.

La composición en diagonal, con la silueta del manto de la Virgen de la Soledad (Pío Mollar, 1941), divide la pintura en dos secciones: una de luz, representada por los cálidos tonos de la cera encendida que alumbran las siluetas de la ermita del Cristo de la Columna y el castillo de Doña Berenguela, y otra de noche, que deja en penumbra las bambalinas de un palio que se pierde en el cielo. Todo ello simboliza el encuentro entre la luz divina y la oscuridad terrenal durante la celebración de la Semana Santa.

La Virgen, con un rostrillo blanco que resalta la expresión de su rostro, deja caer un rosario sobre la palabra "Bolaños", como si derramara su bendición sobre todo el pueblo. Cuatro nazarenos de luz anuncian la llegada de su paso y ayudan a crear perspectiva para aportar dinamismo a esta composición de siluetas planas, transmitiendo también, la atmósfera solemne y emotiva de esta celebración.

El autor hace uso de una tipografía blanca de líneas finas y rectas, la cual resalta sobre la degradación de tonos anaranjados. La disposición de la leyenda en varios renglones y la unión de las palabras con una S común aportan un carácter moderno y contemporáneo a la composición.

 

 

Cartel del pregón universitario 2024 (12 de marzo) de la Hermandad de los Estudiantes (Sevilla)

El autor plasma unos versos de "Vexilla Regis", himno tradicional para la Semana de Pasión compuesto por Venancio Fortunato hace unos 1500 años. La obra está realizada en técnica mixta (grafito, bolígrafo y acrílico) sobre papel de algodón encolado a una tabla de 60 x 100 cm.

Martín Mena sobrepone diferentes piezas de papel a modo de collage para jugar con los planos y las texturas. El papel es, el gran protagonista de esta obra: un material común que ha servido durante siglos como soporte artístico, cultural e intelectual, cuyo blanco envejecido aporta a esta obra la luz, como símbolo de vida que se antepone al fondo negro carbón, que nos habla de luto y muerte, ese negro que trae también la melancolía de las antiguas pizarras que tanto han enseñado entre los muros de la sede principal de la Universidad de Sevilla.

Sobre el blanco y el negro, entre la vida y la muerte, se desgarra la silueta indiscutible del Cristo la Buena Muerte, con una paleta de color valiente que capta la atención del espectador. La obra barroca de Juan de Mesa se alza como un estandarte, quedando atrás sutilmente proyectada la silueta del ángel de la fama que corona la fachada principal del monumental edificio de la antigua Fábrica de Tabacos.

Entre los papeles, que parecen sacados de cualquier carpeta estudiantil, vemos la Virgen de la Angustia (Juan de Astorga, 1817), retratada en una estampa de la década de 1940. Bajo ella vemos el nombre del pregonero Manuel Cantelar Casado, al cual el pintor agradece su aliento y colaboración en todo este proceso.

Sobre dicha estampa cuelga un discreto rosario con sobrias cuentas de madera, del que pende una elegante cruz que nos conduce hasta la leyenda del cartel. Aquí se refleja el carácter de la Hermandad de los Estudiantes: el santo rosario como testimonio público de fe y oración, la austeridad y elegancia de esta cofradía cada Martes Santo.

 

Volver          Principal

www.lahornacina.com