NOTICIAS... MISCELANEA

Imágenes y Semejanzas

La sala de exposiciones de RTVA/Canal Sur Radio y Televisión (Pabellón de Andalucía. Calle José Gálvez, 1. Isla de la Cartuja. Sevilla) acogerá del 16 de marzo al 11 de abril de 2020 la exposición de pintura Imágenes y Semejanzas. Se trata de un proyecto colectivo sobre la Semana Santa de Sevilla y su contexto desde la visión de 30 artistas contemporáneos: Arístides Artal, Beatriz Barrientos, Rubén Belloso, Jesús Caballero, Aída Carvajal, Antoine Cas, José Luis Castrillo, Manolo Cuervo, Taller Daroal, Antonio Díaz Arnido, Juan Fernández, Pablo Flores, Ricardo Gil, Agustín Israel, Jarén, Daniel Jiménez Díaz, Rafael Laureano, Alejandro Mairena, José Luis Marín, Javier Montes, José Naranjo Ferrari, David Payán, May Perea, Antonio Rodríguez Ledesma, Alberto Rufo, Francisco Santiago, Isabel Sola, Álvaro Soto, Rubén Terriza y Adrián Riquelme, que además es comisario de la muestra. El horario de visitas a la exposición Imágenes y Semejanzas es el siguiente: todos los días, de 11:00 a 14:00 y de 16:00 a 21:00 horas (sábados, domingos y festivos, solo mañanas).

Andrés Carrasco

Obras para la portada y la contraportada de la revista murciana Cabildo. En la portada aparece una pintura del ideal de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Murcia, mientras que en la contraportada vemos el reverso del cuadro con anotaciones y un dibujo de la Venerable Juana de la Encarnación de Murcia, religiosa agustina que se estaba acomodando en la rutina de la vida conventual y se convirtió al mirar el rostro del Nazareno, escribiendo meditaciones sobre la pasión de Cristo y llevando una vida de penitencia y virtudes heroicas.

El joven pintor Andrés Carrasco, que también ha llevado a cabo las tareas de maquetación, ha contado con la colaboración del artista malagueño Ángel Sarmiento Burgos, quien ha realizado el mascarón y los laureles que coronan el marco del cuadro. La fotografía corresponde a Alejandro Naranjo.

Manuel Caliani

Cálido, henchido, candente, sensible... Así es el Amor de los amores. "Amor por siempre a ti, dios del amor". Así es loado con cantos Cristo, vivo y presente en la Eucaristía. Lo que el manjar de la comunión es a la misa, es lo que a estas tierras onubenses, y muy especialmente a Rociana del Condado, es la fresa. Es la fresa "el pan de cada día" de Rociana: místicamente, como metáfora de la Eucaristía, es el alimento espiritual, resumible en el amor de Dios y hacia Dios, el amor al vecino y a uno mismo; en lectura profana, es el fruto que redime día a día a tantas familias de esta localidad. La fresa es carne, la fresa es sangre, y no podía para Rociana encontrar mejor símil con Cristo, el manjar superlativo que entrega su cuerpo y derrama su sangre por amor, que la fresa. Así es representado Cristo, flamante, refulgente, palpable, todo amor.

En este cartel del artista onubense para anunciar la Semana Santa de Rociana, realizado en acuarela y texto en collage, Cristo enamorado nos trae con su sangre derramada la Salvación y cae su jugo de fresa sobre nosotros, representados en los rotundos nazarenos de la procesión del Cristo del Amor, receptores con la meditación y la humildad de esta gracia. Entonces llega la victoria, el triunfo de los triunfos, eligiendo una visión del Cristo del Amor en su paso con una prominente palmera. Con amor no hay noche, no hay pecado, no hay muerte... El mandato de Cristo fue claro: "Amaos los unos a los otros". Caliani ofrece su personal visión de la Semana Santa de Rociana. Muy especialmente a la Hermandad del Santísimo Cristo del Amor en su Entrada Triunfal en Jerusalén, obra de su querido maestro, el escultor rocianero Juan Manuel Parra Hernández.

Antonio Díaz Arnido

Dos obras del pintor y restaurador sevillano: el cartel oficial de la Semana Santa de Cuenca 2020, declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional. Obra realizada en grafito y acrílico sobre tabla con unas dimensiones de 90 x 50 x 5,5 cm. El artista fusiona el inconfundible paraje conquense de las Casas Colgadas con la silueta del capuz de los nazarenos y nazarenas de Cuenca. La sobriedad cromática y ciertos detalles estilísticos se inspiran en el cartel pintado por el maestro Antonio Saura para la Semana Santa de Cuenca del año 1966. La fotografía técnica de la obra es de Carlos Roncero Mesa. Este cartel de Antonio Díaz Arnido ha sido realizado por encargo de la Junta de Cofradías de Semana Santa de la Ciudad de Cuenca.

Por otro lado, la obra EL CARMEN. 1995-2020, cartel del XXV aniversario de la Hermandad del Carmen Doloroso (Sevilla). Propuesta basada en tres conceptos: "barrio" (se concibe como una "intervención" sobre un muro de las casas del viejo Pasaje González Quijano, usando como vehículo de expresión el concepto de arte urbano), "origen" (varios hitos de la cultura social de 1995, locales e internacionales, son reflejados por el autor de modo subliminal en la obra) y "hermandad" (el rostro de la Virgen del Carmen, titular mariana de la hermandad, es el protagonista principal de la obra). En el plano inferior, una de las aportaciones más características del Carmen Doloroso, uno de los grandes iconos pop de la actual Semana Santa de Sevilla, elemento iconográfico de la Pasión de Cristo: el gallo del paso de las Negaciones de San Pedro.

Nuria Barrera

Cartel pictórico anunciador de la Semana Santa del presente año 2020 en el seno de la famosa hermandad sevillana de la Esperanza de Triana, realizado por la artista sevillana Nuria Barrera Bellido. La obra, en óleo sobre lienzo, retrata metafóricamente el momento que pone fin a la larga espera de todos los hermanos de dicha corporación de penitencia: el preciso instante en que la cruz de guía que abre su cortejo procesional cruza el dintel de la Capilla de los Marineros. Alrededor de la misma se representan todos los colectivos que conforman la referida cofradía. En el centro de la composición, se representa el magnífico paso de palio de Nuestra Señora de la Esperanza con toda la candelería encendida a la espera de una nueva Madrugada del Viernes Santo.

Fernando Vaquero

Cartel anunciador de la Semana Santa de Marchena 2020, singular obra titulada Luna de Parasceve con la que el artista sevillano recoge la tradición de maestros como Rembrandt, Rubens o Caravaggio, que pintan la escena del Descendimiento de Cristo ya de noche. Vaquero no dulcifica el notable dramatismo de este pasaje de la Pasión de Jesús para hacernos reflexionar sobre lo ocurrido en el Gólgota hace ya más de 20 siglos.

La hechura del Cristo es la del titular de la Hermandad del Santo Entierro y Soledad de Marchena, una talla del escultor manierista Jerónimo Hernández (1575) que ha representado a lo largo de su historia dos momentos pasionistas: el Descendimiento y el Traslado al Sepulcro. Fernando Vaquero lo representa en el momento intermedio de ambas escenas, empleando una vista cenital poco común: José de Arimatea y Nicodemo se acercan al cuerpo para cogerlo e iniciar su Santo Entierro. La cruz ensangrentada en la que murió yace también en el suelo, a su lado, junto a los tres clavos y el mazo. Las tres Marías o Santas Mujeres aparecen al fondo de la penumbra, con su particular manera de entrelazar sus manos. La Virgen está representada de modo simbólico en el único tono que el pintor ha utilizado para pintar este cuadro: el azul, que es el color que simboliza la pureza, la virginidad y la Inmaculada Concepción de María.

José Luis Castrillo

Si abrimos la noticia con la exposición Imágenes y Semejanzas, cerramos la publicación con un detalle de la obra con la que el reconocido pintor sevillano participa en dicha muestra colectiva sobre la Semana Santa en Sevilla, El Señor del Gran Poder, un óleo sobre lienzo de 162 x 130 cm que retrata al venerado Nazareno.