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Antonio Labrador

Copia a tamaño natural de la venerada imagen de Nuestra Señora de la Esperanza del barrio sevillano de Triana. Su destino es un oratorio particular de la ciudad de Granada. Está tallada en madera de cedro en su totalidad y policromada mediante la suma de diversas capas de veladuras al óleo pulimentado.

La talla no solo reproduce con sumo detalle la inconfundible fisonomía de la Virgen, sino también su atuendo más popular, labor que corresponde a José Antonio Moreno Bernal. Los ojos y las lágrimas que lleva en su mascarilla son de cristal fundido. Las fotografías han sido realizadas por Arturo Merino.

José Luis Castrillo

El pintor sevillano presenta dos obras sobre imaginería sevillana. Con la primera, un óleo sobre lino de 162 x 130 cm, pretende hacer una recreación de la imagen de Jesús del Gran Poder a principios del siglo XX, de ahí que el famoso Nazareno de Juan de Mesa aparezca retratado en base a la documentación gráfica existente.

La segunda muestra un primer plano de Jesús Cautivo en el Abandono de sus Discípulos, imagen titular de la Hermandad de Santa Genoveva. Al igual que la anterior ha sido pintada al óleo sobre lino (41 x 33 cm). Castrillo profundiza en la mirada del Cristo labrado por José Paz Vélez (1956-1957), absorta en su trágica soledad.

Óscar Salmerón

Imagen de Jesús Cautivo inspirada en la figura del madrileño Cristo de Medinaceli, origen de una iconografía que representa a Jesús con las manos atadas tras haber sido apresado en el huerto de Getsemaní y que gozó de gran difusión entre los mercedarios por su papel de libertadores de los cautivos cristianos.

Esta obra de tamaño natural muestra a Jesús quieto y de pie. La peana imitando el mármol nos indica que ya se encuentra en el palacio del sumo sacerdote. Por la inclinación de la cabeza y el gesto de dolor parece haber sido representado en el momento en que recibe la bofetada de uno de los alguaciles (Jn 18, 22).

Adán Jaime

Puñal para la Virgen de Guadalupe en su Esperanza (Málaga). Ha sido realizado por el orfebre malagueño en alpaca dorada, con incrustaciones de nácar y perlas cultivadas, además de engastes de circonitas. El diseño de esta pieza con reminiscencias propias del barroco colonial ha sido realizado por Juanjo Galiano.

Con esta bella obra Adán Jaime vuelve al circuito artístico tras un largo periodo de inactividad por problemas de salud. La malagueña dolorosa de Guadalupe en su Esperanza es una obra del recientemente fallecido escultor Luis Álvarez Duarte. Fue presentada en La Hornacina el 9 de marzo de 2015.

David Payán

Cartel anunciador de las Fiestas de Nuestra Señora del Rosario del municipio sevillano de Benacazón. El eje central es un primer plano de la imagen realizado de manera colorida y fresca, llegando a un expresionismo figurativo cuyo objetivo no es reflejar un mundo realista y fiel, sino un mundo interior de emociones y sentimientos. Junto con un cromatismo marcado por las tonalidades muy contrastadas y la fuerte saturación, el autor aumenta el poder expresivo de la línea y la forma. Además de la experimentación con colores puros, se introduce el negro para potenciar esa parte emocional que se pretende transmitir. Lo anterior se enmarca en un fondo blanco. En la parte inferior vemos una representación de un entorno natural, característico en la obra de Payán, que suele iniciarse en abstracto y a los que poco a poco se incorporan elementos figurativos, y en los que la naturaleza juega un papel clave. Todo ello aparece rodeados por el rosario como símbolo esencial. En la parte superior, dos elementos de forma circular representan el sol y la luna, el día y la noche de la procesión del Rosario. En los laterales, dos planos diagonales que otorgan a la obra dinamismo: el verde se asocia a la naturaleza y también a la sanación y a la esperanza, mientras el azul representa a la Virgen María.

Pablo Lanchares

De nuevo una imagen de Jesús Cautivo a tamaño natural para una colección particular, en este caso de Jerez de la Frontera. Ha sido tallada para vestir en madera de cedro, con policromía aplicada al óleo. En su mascarilla lleva pestañas superiores de pelo natural y una lágrima de cristal.

A diferencia de la anterior, esta obra de Lanchares muestra a Cristo en los instantes inmediatamente posteriores a su captura, lo que se advierte en el resignado gesto de entrega y en los restos del sudor de sangre y del llanto como consecuencia de la agonía que acababa de sufrir en el Huerto de Getsemaní.

Gonzalo Borrego

Cartel de las Fiestas de la Virgen de los Milagros, patrona de El Puerto de Santa María (Cádiz). Pintura realizada sobre todo en acuarela sobre papel (65 x 50 cm), habiendo empleado también el autor el lápiz de color y el pan de plata para detalles puntuales. Sobre el lado izquierdo del manto de la Virgen reposa el bastón de alcaldesa de la ciudad. Sus vestiduras bordadas desaparecen para dejar ver el castillo de San Marcos, emblema de la localidad. Con sus manos la Señora sostiene al niño y al mismo tiempo protege y bendice a su pueblo. En las esquinas superiores vemos los castillos y leones de Alfonso X, presentes en pinturas de la fortaleza y en un manto que posee la Virgen de los Milagros, muy vinculada con el referido monarca católico. Esos castillos y leones se degradan a medida que se acercan a la Virgen ya que de ella emana un gran resplandor. Toda la composición está enmarcada por una leyenda con tipografía gótica en negro y siena sobre un fondo que imita la textura de los pergaminos. La leyenda es de Alfonso X y pertenece a las Cantigas de Santa María. Por último, en la parte inferior, y fuera de la composición, observamos las letras de la advocación mariana, teniendo en su interior las ondas del mar en azul y pan de plata. A la izquierda aparece el 20 y a la derecha el 19 (2019).