Primero de los cuatro arcángeles que el escultor de Morón de la Frontera (Sevilla) ha realizado para la Hermandad del Santísimo Sacramento y Cofradía de Penitencia de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y María Santísima del Amor, del municipio gaditano de San Fernando.

El encargo de los arcángeles se remonta a finales de 2016 para su entrega en esta Cuaresma de 2020. Martín Nieto los ha ido realizando poco a poco, ya que son unas piezas de mucho trabajo y delicadeza en su ejecución. Cada uno de ellos tiene una altura aproximada de 70 cm. Han sido tallados en madera de cedro real, dorados, estucados y decorados al temple, cincelados y por último policromados al óleo.

Los arcángeles son San Miguel, San Rafael, San Gabriel y San Sealtiel. En La Hornacina respetamos el deseo del autor de publicarlos uno a uno, y por eso iremos ampliando y actualizando esta noticia a medida que vayamos recibiendo el resto de piezas. En principio, todos se mostrarán a falta de los detalles de orfebrería, que están siendo cincelados en metal con baño de plata por el orfebre isleño Miguel Cuadros Belizón.

En el caso de San Miguel, el primero que publicamos (24 de marzo de 2020), el arcángel llevará una lanza en su mano izquierda y un escudo en el antebrazo derecho, mientras que el demonio llevará grilletes y una cadena al cuello con la que es sujetado por el arcángel.

El segundo que publicamos es San Rafael (20 de abril de 2020), que portará en su mano izquierda el cayado con la bota del peregrino colgada de su parte alta -el santo es, junto con San Roque y San Cristóbal, patrón de los peregrinos-, mientras en la derecha llevará el pez en alusión al pasaje bíblico del Libro de Tobías.

El tercero es San Sealtiel (28/04/2020), el arcángel que impidió el sacrificio de Isaac, que llevará el incensario como símbolo de adoración -su atributo típico, ya que suele ser invocado para realizar buenos rezos- y, al igual que el resto, una galleta o nimbo cincelado como presea.

Por último, San Gabriel (09/05/2020) llevará la vara de azucenas en su mano izquierda en alusión a las flores que entrega a María en la Anunciación como símbolo de su pureza, así como una estrella en la cabeza; pues este arcángel, por su papel como mensajero de Dios, es la "estrella que anuncia el día" del orbe cristiano.

La labor de dorado en oro fino de ley es obra de Francisco Pardo -en la galería fotográfica que acompaña la noticia se muestran varias fotos del proceso de dorado de la obra- y la labor de estofado y decoración ha vuelto a correr a cargo del pintor sevillano Manuel Peña Suárez.

En el proceso de ejecución de estas obras, que comprende las labores de modelado, talla, aparejos, cincelado y policromías, Martín Nieto ha contado con la colaboración de José Henares (ensamblado y sacado de puntos), Juan José Fernández Almagro (oficial de taller) y Antonio Jesús Ángel Verdugo (escofinado y lijado).

En esta misma página les ofrecemos fotografías del boceto en barro de una imagen del Ecce Homo que el artista ha modelado en estos meses de confinamiento. La obra mostrará unos rasgos anatómicos y expresivos inéditos en su trayectoria, será tallada en madera de cedro a tamaño natural y tendrá carácter procesional.