IMPRESIONISMO. UN NUEVO RENACIMIENTO

14/01/2010


 

 

 

La exposición Impresionismo. Un Nuevo Renacimiento recorre la historia del más importante movimiento artístico moderno, a través de las grandes obras del Musée D' Orsay. Por primera vez, un conjunto de obras impresionistas de primera importancia se presenta en España, en la Fundación Mapfre, por lo que se trata de una ocasión única para contemplar, a través de los grandes maestros, una visión global de este movimiento que cambió la percepción de la modernidad. El Impresionismo supone un nuevo Renacimiento, que cambiará el panorama artístico.

Sin embargo, este movimiento no supone una ruptura radical con el arte tradicional, y no ahoga otras formas de modernidad, sino más bien al contrario. En los años 70 del siglo XIX, en París, conviven impresionismo, simbolismo, academicismo, decorativismo, etcétera. Y esa riqueza estilística está contemplada en la muestra Impresionismo. Un Nuevo Renacimiento para destacar, aún más, el triunfo del arte nuevo.

Manet se convierte en el hilo conductor de este movimiento, personificando todas sus riquezas y contradicciones; fue un artista apegado a la moderna tradición velazqueña, que se convirtió en el gran animador de los jóvenes artistas que conformarían La Escuela de Batignolles y que animarían las primeras exposiciones impresionistas.

 

 

La historia del impresionismo se recorre en Impresionismo. Un Nuevo Renacimiento a través de artistas y obras imprescindibles para la Historia del Arte: Claude-Oscar Monet (1840-1926), autor de Las Barcas. Regatas en Argenteuil (hacia 1874), se presenta como el artista más virtuoso, capaz de captar con sus pinceladas pequeñas y vibrantes los continuos cambios atmosféricos; Pierre-August Renoir (1841-1919), por su parte, aparece como el más sensual y delicado, con obras como El Columpio (1876) o Madame Darras (hacia 1868).

Camille Pissarro (1830-1903), creador de Tejados Rojos, Rincón de Pueblo y Efecto Invierno (1877), y Paul Cézanne (1839-1906), artífice de El Golfo de Marsella desde L'Estaque (1878-1879) enfatizan la solidez estructural de sus composiciones, mientras su compatriota Edgar Degas (1834-1917) transmite en lienzos como La Clase de Danza (1873-1876) o Retratos en la Bolsa (1878-1879) la instantánea de la vida moderna. Todos ellos demuestran el entusiasmo por la modernidad que inició y vertebró brillantemente Édouard Manet (1832-1883).

 

 

Desde el 15 de Enero hasta el 22 de Abril de 2010 en la Sala Recoletos de la Fundación Mapfre
(Paseo de Recoletos, nº 23, Madrid) Horarios: los lunes, de 14:00 a 20:00 horas;
de martes a sábado, de 10:00 a 20:00 horas; los domingos y días festivos, de 12:00 a 20:00 horas.

 

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