TABLAS FLAMENCAS DEL MUSEO LÁZARO GALDIANO

09/11/2017


 

 

La exposición Una colección redescubierta. Tablas flamencas del Museo Lázaro Galdiano presenta el conjunto de tablas flamencas reunidas por José Lázaro y su esposa Paula Florido durante los treinta primeros años del siglo XX. Una colección sin parangón entre los coleccionistas españoles tanto por su calidad como por su cantidad. La colección es sistemática, variada y posee obras excepcionales.

La pintura flamenca de los siglos XV y XVI es profundamente innovadora. Introdujo, por ejemplo, el uso generalizado de la pintura al óleo sobre tablas preparadas con creta, y también, cambios en la relación entre el artista y su clientela. Los pintores dejaron de trabajar solo para la Iglesia y la alta nobleza y, a partir del siglo XIV, lo hicieron también para una importante burguesía emergente afincada en las ciudades. Este grupo social se convirtió en su principal cliente: ávido de imágenes para la devoción privada, demandaba una pintura religiosa intimista destinada a remover las conciencias.

La pintura flamenca experimentó un gran éxito no solo artístico sino también comercial. Los pintores dejaron de trabajar únicamente por encargo y empezaron a hacerlo para un comercio cuyo destinatario directo podían llegar a desconocer. En este sentido se crearon composiciones utilizadas como patrón a partir de las cuales producían diferentes variantes, copias y réplicas en función de su éxito comercial.

Los artistas se agrupaban en talleres, en los que existía un importante nivel de especialización. Su labor se regulaba a través de una institución de carácter ciudadano llamada Gilda (gremio). Para poder ser miembro de la misma un pintor debía no solo demostrar su pericia, sino también su condición de ciudadano, burgués, de la villa en cuestión. Esta organización de raíces ciudadanas produjo también diferencias estilísticas asociadas a los grandes maestros que trabajaban en ellas. De este modo, se distingue la influencia de Van Orley en Bruselas, las de Hans Memling y Gerard David en Brujas o la de Quentin Metsys en Amberes.

En esta exposición el Museo Lázaro Galdiano se ha propuesto hacer palpable dicho carácter ciudadano de la pintura flamenca, y por ello sus responsables han agrupado las obras según la ciudad en la que se crearon, destacando la influencia de los artistas mencionados.

Un caso especial lo constituye la localidad brabantina de s'-Hertogenbosch, ciudad en la que vivió toda su vida y de la que tomó su nombre Hieronymus van Aecken, Bosch, traducido al español como El Bosco. A excepción de José Lázaro, ningún otro coleccionista español del siglo XX poseyó obras de este artista. Sin embargo, José Lázaro atribuyó a este célebre pintor tres piezas de su colección: Las meditaciones de San Juan Bautista, actualmente indubitada de este artista; La visión de Tondal (imagen superior), atribuida recientemente a su taller, y Las injurias a Cristo (imagen inferior), de un seguidor suyo y de la que se conservan otros dos ejemplares, uno en el Escorial y el otro en el Museo de Bellas Artes de Valencia.

Por la importancia de dicho conjunto del Bosco, el Museo Lázaro Galdiano le ha dedicado un espacio en exclusiva en su primera planta. La sala 17 de la segunda planta acoge el arte producido en la ciudad de Amberes, y la sala 24, en la tercera planta, el de Brujas y Bruselas.

Tras la restauración de una decena de pinturas y un profundo estudio historiográfico y técnico, esta muestra exhibe por primera vez la colección completa de pintura flamenca de los siglos XV y XVI del Museo Lázaro Galdiano. La exposición Una colección redescubierta. Tablas flamencas del Museo Lázaro Galdiano aporta una importante cantidad de nuevas atribuciones artísticas, el estudio del dibujo subyacente de todas las obras y la identificación botánica de las plantas representadas, que han sido recogidos en el catálogo de la muestra.

Por último, se realizarán cuatro visitas a la muestra guiadas por los educadores del Museo Lázaro Galdiano, siendo necesaria inscripción previa en educacion@museolazarogaldiano.es. Las fechas de las visitas, que darán comienzo a las 12:00 horas (duración aproximada de 1 hora y 15 minutos), serán los sábados 2 y 16 de diciembre de 2017 y 13 y 20 de enero de 2018 Hora: 12 h. Visita incluida con la entrada al museo (entrada general 6€).

 

 

Del 17 de noviembre de 2017 al 28 de enero de 2018 en el Museo Lázaro Galdiano (Calle Serrano 122, Madrid)
Horarios: martes a sábado, de 10:00 a 16:30 horas; domingos, de 10:00 a 15:00 horas; lunes, cerrado.

 

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