NUEVA OBRA DE ENRIQUE LOBO LOZANO

17/05/2012


 

Galería de Fotos

 

Hablamos de una obra a tamaño natural que representa a la Virgen en actitud de ruego y consumida por el dolor. Los labios están temblorosos y abiertos, la cabeza se halla elevada al cielo y las manos sujetan nerviosamente el rosario y un pañuelo con el que se dispone a enjugar el llanto que baña sus mejillas.

A diferencia de otras creaciones de Enrique Lobo Lozano sobre el mismo tema, en las que se advierte una notable entereza ante la agonía de Cristo, en este caso nos encontramos con un simulacro bastante dramático que, sin perder la compostura propia de sus líneas clásicas de ejecución, es la viva imagen de la Madre angustiada, abatida y sollozante; al estilo de piezas clásicas del entorno sevillano como la Virgen de los Dolores y Misericordia, con la que también comparte el modelado del cabello, ondulado y peinado al centro, el cual queda descubierto en su nacimiento al igual que ambas orejas.

Tallada en cedro policromado, posee suaves carnaciones trigueñas, ojos y lágrimas vítreas, y el interior de la boca anatomizado, incluyendo la lengua, la campanilla y todas las piezas dentales. Ha estado expuesta durante un tiempo, coincidiendo con Cuaresma y Semana Santa, en una galería de arte de Zaragoza.

 

Nota de La Hornacina: acceso a la galería fotográfica de la obra a través del icono que encabeza la noticia.

 

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