Hace más de dos meses que un andamio de grandes dimensiones oculta el retablo central de la iglesia parroquial del municipio leridano de San Lorenzo de Morunys, antiguo monasterio benedictino. El edificio tiene su origen en el románico del siglo XI importado de Lombardía (Italia), con adiciones renacentistas en el claustro y el campanario y valiosos ejemplos barrocos de pintura, escultura y retablística en su interior.

La restauración está siendo efectuada por la empresa gerundense Conservació De Patrimoni 4restaura y afecta al conjunto pictórico mural barroco del presbiterio, uno de los más destacados del Barroco en la Cataluña Central. Está previsto que los trabajos concluyan antes de acabar el año.

Los murales se encontraban en un grave estado de deterioro. Los expertos calculan que se habrían pintado entre finales del siglo XVIII y principios del XIX. La obra sigue las directrices de la época. En la parte inferior vemos representaciones de santos, en la central los evangelistas y los doctores de la iglesia, y en la superior, una gloria celestial con imágenes de santos, centrando el conjunto la Santísima Trinidad.

El importe de la restauración es casi de 45.700 euros, de los que 22.000 han sido aportados por dos subvenciones de la Generalitat de Catalunya (una de Cultura y una de Turismo), mientras que el resto, a partes iguales, ha sido aportado por el Ayuntamiento de Sant Llorenç de Morunys, su parroquia y el Obispado de Solsona.