NUEVA OBRA DE ANTONIO LABRADOR

29/07/2018


 

 

Nueva imagen de Niño Dios para el culto particular de una familia sevillana. Ha sido tallado por el escultor e imaginero con estudio en Guillena (Sevilla) en madera de cedro, policromado mediante veladuras oleosas y con ojos de cristal de tono azul en su mascarilla. Tiene una altura de unos 50 cm, aproximadamente.

Labrador ha querido optar, iconográficamente hablando, por una versión del Niño Triunfante o Victorioso, portando orgulloso la Cruz como signo triunfal de su Resurrección sobre la muerte como Redentor del mundo cristiano; al tiempo que levanta su mano derecha para bendecir, y el cuerpo adopta un marcado contrapposto con el fin de reforzar su actitud itinerante, adelantando también para ello su pierna izquierda. La obra conjuga la cercanía de los simulacros infantiles con la nobleza y majestad propias de la divinidad.

Como curiosidad que salta a la vista, en esta ocasión, para la resolución de los cabellos, el autor ha optado por una llamativa policromía a base de tonos rubios y ocres, aportando así con esta figura una nota distintiva dentro de su producción. La Cruz, dorada, estilizada y rematada por perillas, es obra de Ana Cerrejón.

 

Nota de La Hornacina: acceso a la galería fotográfica de la obra a través del icono que encabeza la noticia.

 

Volver          Principal

www.lahornacina.com