Dolorosa de tamaño natural para la Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Perdón y María Santísima de la Salud (Tarancón). Es la cuarta obra que el escultor e imaginero sevillano, nacido en Puente Genil (Córdoba), realiza con destino a dicha localidad de la provincia de Cuenca, tras el Cristo de Burgos (2019), la Virgen del Alba (2020) y el titular cristífero de la referida corporación de penitencia (2022), todas ellas presentadas en La Hornacina.

La Virgen de la Salud, talla en madera policromada de candelero para vestir, recuerda con su advocación el momento en que se fraguó la idea de fundar la Hermandad del Perdón y Salud de Tarancón: el largo confinamiento que conllevó la pandemia por la COVID-19 vivida en el año 2020 con el fin de reducir el contagio masivo entre la población mundial, tras lo cual se presentó un ambicioso proyecto en el templo parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, donde ha tenido lugar hoy a las 20:00 horas la presentación de la imagen.

El semblante, de gran delicadeza, presenta la barbilla y los pómulos marcados, la nariz de perfil notablemente simétrico y armónico, las cejas arqueadas y angulares, y la boca menuda, pero de labios carnosos, que deja ver los dientes en su interior. Las manos, excelentemente anatomizadas, se entrecruzan en actitud implorante. Todos estos rasgos buscan la hermosura idealizada de María, pese a su dolor de madre, y la emoción de los fieles ante la tragedia.