RESTAURACIÓN DEL IAPH PARA GRANADA

José Antonio González Jiménez (29/09/2010)


 

 

En el mediodía del pasado 27 de Septiembre, regresaba y era expuesta de nuevo al culto en la realejeña Iglesia de Santo Domingo de Guzmán, la imagen de la Co-Patrona de Granada, la Virgen del Rosario, tras 11 meses de estancia en el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH), con sede en la sevillana Isla de la Cartuja.

La restauración del IAPH ha tenido dos ejes principales. Por un lado, los elementos escultóricos de la Virgen y el Niño, consistente en la fijación de los soportes, eliminación de pequeñas lagunas de policromía, reintegrándose mediante técnicas diferenciadoras, y eliminación de repintes y suciedad que conferían un aspecto manchado a la imagen.

El otro eje ha sido el vestido de plata de la imagen, realizado en el año 1628, y que imita la moda de la corte de finales del siglo XVI. Al respecto, se han eliminado abolladuras, se han vuelto a colocar los elementos decorativos que, o bien se habían desprendido y estaban guardados, o bien directamente estaban perdidos, y han sido rehechos con criterios diferenciadores, para que, visto de cerca, se diferencie lo original de lo nuevo. Además, se ha limpiado en profundidad todo el vestido y se ha protegido para evitar la oxidación de la plata.

También se ha verificado en el IAPH el buen estado de la peana y se ha procedido a su limpieza, eliminando de paso la capa de purpurina y reintegrándose las faltas en el pan de oro que había debajo.

Todos estos trabajos han sido costeados por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, y con ellos, se recupera, para disfrute de todos los granadinos, la imagen de la Co-Patrona de la Ciudad, una talla del XVI que, desde el siglo en que fue ejecutada hasta el día de hoy, se ha ido trasformando y configurando.

Originalmente, esta imagen mariana era una talla completa, fácil de transportar; por ello estuvo en la Batalla de Lepanto, en la galera del almirante granadino Don Álvaro de Bazán. En el año 1670, según reza una piadosa leyenda, estuvo llorando durante 72 horas, y unas mujeres piadosas vendieron todo lo que tenían para hacerle un vestido de plata, guarnecido en piedras, que es lo más característico de la imagen. Precisamente, dichas piedras fueron expoliadas por las tropas napoleónicas del general Sebastiani en el año 1808.

El acontecimiento más milagroso que rodea a esta imagen ocurrió en el mes de Junio del año 1679, estando la ciudad de Granada asolada por la plaga de la peste: cuando se hacían unas rogativas, apareció en la imagen una estrella y las gentes recuperaron la salud. Las consecuencias de este hecho llegan a nuestros días, tanto por lo que se ha escrito sobre el milagro, como por la construcción del suntuoso camarín, que esperamos admirar dentro de poco.

El 14 de Mayo del año 1961, en la Explanada del Triunfo y ante una gran multitud, la imagen fue coronada canónicamente. Los materiales de la corona, una de las mejores piezas cinceladas por el orfebre y escultor granadino Miguel Moreno -quien también ha dirigido la restauración del traje de plata de la Virgen- fueron recolectados entre los granadinos. El año que viene se celebrará el Cincuentenario de su Coronación Canónica.

 

 

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