Nueva obra del imaginero de Vélez-Málaga, destinada a Sanlúcar de Barrameda (Cádiz). Se trata de la talla de María Santísima de la Paz, titular de la Hermandad de la Santa Cruz, Sagrada Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo, María Santísima de la Paz, Santa María Magdalena y San Pedro Apóstol, con sede canónica en la Iglesia de San Francisco, donde tuvo lugar su bendición el pasado sábado.

Realizada en madera de cedro, mide 168 cm de altura y se adapta a los patrones de las imágenes de candelero. Comparte con la presentada hace unos días para Badajoz, la representación del momento en que María es partícipe de la Resurrección de su hijo, haciéndose aún presentes los rigores pasionistas en la dilatación de las fosas nasales y en la mirada acuosa, expresión de un llanto frenado en seco ante el gozoso anuncio.

Las cejas pintadas a pincel con suma maestría, denotan el conocimiento por parte de Israel Cornejo de las mejores técnicas de la imaginería policroma, lo que encuentra reflejo también en la aplicación de frescores y pátinas que acercan a la imagen al canon de belleza típico de las grandes damas del barroco.

Nariz hebraica, labios carnosos y expresivos, dentadura superior e inferior rematada al detalle, fino hoyuelo, destacada marcación de la fosa infraclavicular y unos cabellos que forman artístico moño recogido, exponen ante los fieles una hermosa, serena y devota hechura, muy ajustada a la advocación de la Paz.

Para finalizar hacer mención al coloquial juego de manos. Unas manos expresivas y de gran belleza, exentas para el culto del tradicional manípulo, portando una de ellas un ramo de azucenas en orfebrería. Destacar asimismo la adecuada vestimenta que su autor despliega en las fotografías que se muestran en la galería, dando plenitud a la obra, al completar y poner en valor toda su personalidad.