Este lienzo, realizado por el artista Javier Cámara Sánchez-Seco para una colección privada de Madrid, representa a la Virgen María bajo la advocación de Nuestra Señora de los Dolores.

El autor, partiendo de las enseñanzas de los maestros del Siglo de Oro, ha sabido reinterpretar distintas influencias que confluyen en perfecta armonía: la luz, plasmada según la tradición canesca hace brillar las telas en intensos rojos y azules; por otra parte, el rostro, de bellas facciones, muestra un dolor contenido que enlaza con la aflicción sosegada y casi letifica de las Dolorosas montañesinas.

Licenciado en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid, Javier Cámara es un pintor y restaurador madrileño que ha realizado numerosas obras para particulares e instituciones religiosas.

Cámara ha participado también en varias exposiciones, colectivas e individuales, en importantes galerías y salas de arte, como el Círculo de Bellas Artes o la Casa de Vacas del Retiro de Madrid. Se le puede considerar como uno de los más firmes valores llamado a revitalizar la pintura sacra del siglo XXI.