Obra titulada Retrato de Jesús de Nazaret, un busto de unos 68 cm de altura que representa al Mesías coronado de espinas durante su Pasión. El escultor e imaginero sevillano lo ha realizado en terracota patinada a imitación del yeso sin encargo previo, estando disponible para su adquisición por cualquier persona interesada.

La pieza se halla inspirada muy libremente en un relieve de Josep Llimona que representa la flagelación de Cristo. El material empleado ha sido elegido por el autor para darle todo el protagonismo al modelado y rememorar los yesos de Rodin, gran referente de Llimona, que se conservan en el Musée Rodin de París.