Se incorporan a la iglesia conventual de San Cayetano (Córdoba) dos pinturas al óleo sobre tabla del artista malagueño Raúl Berzosa para ir completando la serie de los fundadores que ocupa la nave central.

Dichas obras representan dos apariciones marianas: la de San Juan de Dios en el Monasterio de Guadalupe (imágenes superiores), cuando el santo carmelita recibe de la Virgen la alta dignidad de ponerle en sus manos al Divino Niño desnudo para envolverlo en pañales, y la de San Ignacio de Loyola en la cueva de Manresa (imágenes inferiores), mientras el fundador de los jesuitas escribía sus Ejercicios Espirituales.

En breve les daremos información de una tercera pintura de Berzosa para el mismo destino cordobés, aún pendiente de entrega: Santo Domingo recibiendo el santo rosario de la Virgen María.

Por otro lado, la iglesia de San Cayetano, llamada también de San José, ha presentado las restauraciones de dos antiguas pinturas sobre lienzo del siglo XVIII (imágenes inferiores) que representan a San Francisco de Paula, de la serie de los fundadores ubicada en las pilastras de la nave central del convento, y a San Juan de la Cruz curando al Hermano Pedro de Santa María, milagro que tuvo lugar en Porcuna (Jaén). Este último es un medio punto de grandes dimensiones ubicado en la bóveda, sobre el retablo de Santa Teresa de Jesús.