La artista hispalense Beatriz Barrientos Bueno nos muestra su particular visión del Beato Juan Pablo II a través de un óleo sobre tabla que acaba de realizar para el Templo del Santo Ángel de Sevilla.

En la obra, que mide 138 x 194 centímetros, aparece el pontífice polaco en el interior de la Iglesia de los Carmelitas Descalzos de Wadowice, su localidad natal, ante el retablo mayor que preside la imagen de San José, al que dejó en su testamento el anillo de su pontificado, el tercero más largo de la historia.

En dicho lugar recibió Juan Pablo II un escapulario con la imagen de la Virgen del Carmen cuando tenía 16 años de edad. A partir de entonces, el futuro papa formó siempre parte de la numerosa familia del Carmelo, y su tesis doctoral versó sobre el Acto de Fe en la doctrina del español San Juan de la Cruz.

El templo del Santo Ángel, en el que fue presentada y bendecida ayer esta obra, coincidiendo con la beatificación de Juan Pablo II, cuenta con otra creación de la autora, que posee las mismas características y está dedicada al Éxtasis de Santa Teresa de Jesús. Fue presentada en La Hornacina el 4 de junio de 2010.