OTEIZA. LA DESOCUPACIÓN DEL ESPACIO

26/09/2016


 

 

Jorge Oteiza (Orio, Guipúzcoa, 1908 - San Sebastián, 2003) es sin duda uno de los referentes de la escultura de la segunda mitad del siglo XX, con una clara vocación por la experimentación y la reflexión teórica. La Fundación Catalunya-La Pedrera acoge la exposición Oteiza. La desocupación del espacio, una completa muestra organizada en colaboración con la Fundación Museo Jorge Oteiza, que analiza la trayectoria del artista vasco a través de una selección de 130 obras procedentes, en su mayoría, del Museo de Alzuza.

La exposición se mostrará en la sala de exposiciones del edificio barcelonés de La Pedrera (Paseo de Gracia, 92) entre el 27 de septiembre de 2016 y el 22 de enero de 2017 (diario, de 10:00 a 20:30 horas). Sus comisarios son Gregorio Díaz Ereño y Elena Martín, director y conservadora del Museo Oteiza, respectivamente.

La presentación de Oteiza. La desocupación del espacio en La Pedrera se convierte en una gran oportunidad de conocer la obra de este artista fundamental en la historia del arte del siglo XX, del que ya hace treinta años que en la ciudad de Barcelona no se ha organizado ninguna muestra monográfica.

La exposición permite trazar un recorrido por todas las etapas del trabajo escultórico de Oteiza, desde las formas más arcaicas de las primeras piezas hasta las últimas series, pasando por aquellas que componen el eje central de su Propósito Experimental; y, al mismo tiempo, quiere dar a conocer diversas facetas de su trayectoria vital, política y creativa, que comprenden desde la arquitectura o la poesía a la pedagogía o la agitación cultural.

 

 

Oteiza. La desocupación del espacio cuenta con una amplia y cuidada selección de obras, propone un recorrido cronológico y documentado por los diferentes procesos experimentales de desocupación y vaciamiento realizados por el escultor hasta llegar a su obra conclusiva de finales de los años 50, que representan el tráfico de una escultura figurativa en una de puramente espacial. A lo largo de este proceso, la escultura supera los límites de la materia y se encarna simbólicamente en el vacío, un espacio de plenitud y sin tiempo que adquiere toda la significación espiritual y metafísica ansiada por el artista.

La exposición incorpora también numerosos dibujos y documentación original del artista, y da a conocer diversas facetas de su trayectoria vital, política y creativa, que comprenden desde la arquitectura o la poesía hasta la pedagogía o la agitación cultural y ponen de manifiesto su voluntad de participar en la construcción social desde el arte y la estética.

Esta exposición se ha organizado en estrecha colaboración con la Fundación Museo Jorge Oteiza, que, además de realizar el comisariado, cedió la mayoría de las obras presentes en esta retrospectiva.

Los fondos del Museo Jorge Oteiza como los presentes en Oteiza. La desocupación del espacio están integrados por un total de 1.650 esculturas, 2.000 piezas de su laboratorio experimental, además de una gran cantidad de dibujos, collages y documentación personal del propio Oteiza, que permiten una perfecta aproximación a todo el proceso de trabajo y experimentación del artista vasco, cubriendo todas sus facetas.

 

 

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