Esta Dolorosa de candelero para vestir tiene como destino una colección particular de Guadix (Granada). Mide 170 cm de altura y se halla realizada en madera de cedro real, tallada y policromada al óleo.

La pieza recuerda varios tipos iconográficos imperantes en el Barroco sevillano desde finales del siglo XVII y extendidos, sobre todo, en la centuria siguiente. Presentan ancho rostro, grácil inclinación de la cabeza y carnosas manos dispuestas a la altura del pecho. Los músculos del cuello, sin embargo, aparecen más contraídos para subrayar la crispación anatómica que produce el llanto de la Señora.

La imagen posee pestañas superiores de pelo natural, cinco lágrimas de cristal y suaves carnaciones, con los pómulos y los abatidos párpados enrojecidos por los sollozos. Al estar abierta, la boca deja ver su interior anatomizado. Como podemos ver en las instantáneas de la obra aún sin concluir, tiene el cabello tallada a base de delicadas ondas, peinado hacia atrás y recogido a la altura de la nuca en una coleta.

Si pulsan sobre el icono, podrán ver un reportaje fotográfico de una creación mariana cuyo proceso de ejecución comenzó en 2009, en el taller del artista situado en el nº 52 de la sevillana calle Castellar.