ANTONIO LÓPEZ RAMÍREZ

Jesús Abades y Sergio Cabaco (04/07/2017)


 

"Lo más importante de una obra no es su destino, sino la confianza que te dan hacia el trabajo que realizas"

 

 

Uno de tus primeros encargos de envergadura, por no decir el primero, consistió en tallar los dos soldados romanos que procesionan en el paso de misterio de la popular hermandad jerezana del Amor. Tus obras tuvieron que medirse con otras de notable calidad, realizadas por maestros tan dispares como Ramón Chaveli, Antonio Eslava y Francisco Camacho de Mendoza. ¿Cómo afrontaste el reto?

Sí, son mis primeras obras de envergadura y mi primera aportación a la Semana Santa de Jerez. Tenía varios amigos y conocidos en la Hermandad que seguían mis trabajos y mi trayectoria, ellos me animaron a que diera el paso, pues hasta la fecha no había realizado nada en madera. Fue un orgullo y un honor para mí que la Hermandad del Santísimo Cristo del Amor me diera la oportunidad de llevar dos obras de mi hechura en unos de sus pasos, y además como decís, con la calidad de imágenes de diversos artistas de gran nivel que lleva el misterio del calvario. Resaltar la magnífica dolorosa "Nuestra Señora de los Remedios", obra del siglo XVII atribuida al escultor jerezano Francisco Camacho de Mendoza. En resumen, unas obras realizadas en mi taller, procesionando en Jerez, es un lujo, un sueño hecho realidad.

El estilo del flamenco barroco José de Arce y los modelos románticos del siglo XIX, herederos del neoclásico, son influencias recurrentes en tus creaciones. Suponemos que es debido a que ambas se hallan muy presentes en la imaginería de Jerez de la Frontera, tu ciudad natal.

Cómo no, a mí me gusta inspirarme en todo lo bueno, sobre todo en el barroco andaluz, y claro que al ver desde pequeño obras como el Santo Crucifijo de la Salud, de José de Arce, o Nuestro Padre Jesús del Prendimiento, atribuido a Francisco Camacho de Mendoza, al igual que las dolorosas románticas de Juan de Astorga, todo ello sirve de inspiración, al igual que muchas obras de la escuela sevillana, granadina, murciana e incluso me encanta la escuela genovesa que surgió en Cádiz y que tuvo su mayor esplendor en el siglo XVIII.

Fuiste homenajeado hace cuatro años, junto al pintor Ignacio Estudillo, en la muestra de pintura y escultura Jerez, Paleta de Colores, lo que demuestra que Jerez de la Frontera es una ciudad agradecida con sus artistas.

La verdad es que me hizo mucha ilusión. Fue en 2013, me cogió por sorpresa y es de agradecer a la comisión de Paleta de Colores y a la Hermandad del Desconsuelo, que se fijaran en mí para homenajearme junto al pintor Ignacio Estudillo. En esta muestra realicé mi primera exposición monográfica sobre mi obra.

 

 
     
     
Ecce Homo
 
Dolorosa

 

No cabe duda que Jerez posee talento en todos los sectores, no solo en el arte, la cultura y los espectáculos, sino también en la investigación y el emprendimiento. ¿Crees que ese talento está bien gestionado? En el plano patrimonial parece que no demasiado.

No sé si está bien gestionado. Hay gran talento en la ciudad en todos los sectores artísticos. La verdad es que se apuesta más por lo de fuera que lo de aquí. Ya lo dice el refrán, "nadie es profeta en su tierra", y en Jerez mucho menos. Yo gracias a Dios, no me puedo quejar ya que me han homenajeado, tengo una dolorosa, el remate del banderín de la A. M. San Juan, dos imágenes procesionando y una natividad en el Museo del Belén.

Hace unos años nos comentaste que la escultura la ejercías con convicción y vocación. Una vocación que, como muchos escultores andaluces, tuvo un aprendizaje práctico de años en Sevilla.

Desde pequeño siempre me gustó el arte en general, ganando diversos concursos escolares. Me matriculé en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Jerez de la Frontera. Tuve claro que quería entrar en un taller de un escultor-imaginero, lo que en Jerez era un poco difícil ya que existían poco talleres. A mí me encanta la escultura, así que me traslado a Sevilla. Una vez allí, tuve la suerte de frecuentar diversos talleres de imagineros de la ciudad hasta que conocí a Darío Fernández, que me abrió las puertas del suyo y me enseño la disciplina de la imaginería. Le tengo mucho que agradecer.

¿Qué aprendiste de tu etapa como belenista?

Bueno, de toda etapa se aprende algo. Conocí muchos amigos, participé en varios concursos de escultura belenística en Castellón, ganando varios premios... Es un formato muy cómodo para aprender y modelar obras de menor tamaño. Qué mejor que trabajar la imagen de Jesús desde su tierna infancia.

¿Es el Cristo de la Entrada Triunfal en Jerusalén para la localidad de Ubrique (Cádiz) la escultura de la que estás más contento hasta la fecha?

Es una obra muy especial para mí, le tengo mucho cariño, pero las obras son como los hijos, todas tienen algo tuyo. También hay otras de las que estoy muy satisfecho, como Nuestra Señora de Guadalupe (Patrona de El Bosque), María Santísima de la Humildad de Málaga, María Santísima Madre de los Desamparados de Jerez, los romanos de la Hermandad del Amor de Jerez, son obras que no debo dejar atrás.

 

 
     
     
Ángel Custodio
 
Boceto de Crucificado

 

Aunque has labrado figuras para otras localidades como Málaga o Cuenca, la mayoría de tus creaciones se concentran por el momento en el ámbito de la provincia gaditana. No sabemos si buscas mayor expansión profesional o estás cómodo en tu territorio.

No sé si es bueno o malo, son casualidades que se dan; es más, los proyectos que estoy realizando siguen siendo para la provincia gaditana. Pero lo importante realmente de un trabajo no es el sitio en concreto, sino que una persona, asociación, hermandad, etcétera, te den su confianza por el trabajo que realizas y la oportunidad de que una obra tuya salga del taller, reciba culto, la cuiden... eso es lo más bonito de esta profesión.

Nos consta que eres un gran seguidor de La Hornacina desde sus inicios. ¿Está el mundo del arte bien representado en la red o deberíamos los medios tomar otros caminos a la hora de abordarlo?

Sí, desde siempre ha sido una página referente para mí, incluso antes de dedicarme a la escultura, y lo sigue siendo. Creo que el mundo del arte en la red está bien representado, pero en el tema de la imaginería la cosa cambia, hay muy pocas webs dedicadas a ella, así que la labor que realiza La Hornacina es muy importante en favor de la escultura y de la pintura religiosa.

Por último, Antonio, cuéntanos los proyectos que te esperan de cara a la segunda mitad del año. Esperamos que sean muchos y muy fructíferos.

Pues ahora estoy inmerso en la realización de una efigie de María Auxiliadora con destino a La Barca de la Florida, para ser patrona del pueblo, una obra muy compleja de talla completa y estofada en oro fino. También estoy completando el misterio de la Entrada Triunfal en Jerusalén de Ubrique y terminando una dolorosa para Arcos de la Frontera, todo ello para la provincia de Cádiz.

 

 

Volver          Principal

www.lahornacina.com