FLORIDABLANCA, LA SOMBRA DEL REY

18/02/2019


 

 

Introducción

La Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, a través del Ayuntamiento de Murcia, la Consejería de Turismo y Cultura, y Acción Cultural Española (AC/E), con el apoyo de la Fundación Banco Sabadell y de Gesa Mediación, presentan hasta el 28 de abril de 2019, en el Palacio Almudí y la Sala Verónicas de Murcia, la exposición Floridablanca, la sombra del Rey. Esta muestra puede considerarse como una de las magnas exposiciones que en los últimos años se han dedicado a Carlos III o al siglo XVIII español.

El conde de Floridablanca fue un hombre de su tiempo, un periodo de la historia convulso, que se debatía entre acérrimos conservadores de las viejas instituciones y unos impetuosos revolucionarios. También existía una parte de la sociedad, moderada, sin duda medrosa, que era consciente de la imperiosa necesidad de un cambio, de integrarse en la renovación que triunfaba en otras naciones europeas, pero sin una ruptura violenta con el statu quo en el que habían nacido y vivían. Durante medio siglo el murciano José Moñino Redondo, conde de Floridablanca, tomó parte activa en la política que definió la historia de España de su época. Entre 1777 y 1792 desempeñó el cargo de secretario de Estado. Después de su destitución y un amargo período de prisión presidió la Junta Suprema Central en 1808. Fue tan fiel intérprete del ideario político de Carlos III, que a veces resulta difícil discernir quien fue el inspirador. Pero lo que es indiscutible es que fue el que mejor gestionó los proyectos reales y quien más progresó en su ejecución. Su actividad política y administrativa ha sido tan amplia que no hay faceta del aparato del estado que no controlara personalmente o, al menos, supervisara. Competencia directa suya fue la política exterior, pero su actuación se aprecia en comercio, obras públicas, correos, proyectos científicos, industria, ejército, economía, bellas artes y arqueología, universidades, caridad, agricultura...

Floridablanca, la sombra del Rey pretende recrear el imaginario que ilustra la obra de Floridablanca. Para lograrlo se han reunido más de 300 obras agrupadas en quince secciones. Solo por el número de piezas expuestas puede considerarse como una de las más grande exposiciones que en los últimos años se han dedicado a la época de los monarcas Carlos III y Carlos VI. Entre las pinturas cuenta con obras de Goya, Mengs, Batoni, Tiépolo, Maella, Bayeu, Esteve, Inza... La escultura está representada desde los bustos de Floridablanca y José Nicolás de Azara a la monumental estatua ecuestre de Carlos III de la Real Academia. No faltan las producciones de los talleres reales de piedras duras (un excepcional George Washington, imagen superior), de relojería, de porcelana... Entre las obras de artistas de patrocinio regio destaca por la elegancia de líneas el pianoforte realizado para la infanta de España María Luisa de Borbón. Dibujos, estampas y libros muestran a la vista de los espectadores un sinfín de obras políticas, científicas, literarias y militares. Todas estas obras proceden de Reales Academias, de los Museos, Bibliotecas y Archivos Nacionales, Museos Provinciales, Patrimonio Nacional y de algunas de las más importantes colecciones privadas de nuestro país.

La mayoría de estas obras cuenta con una señalética explicativa compleja (ya sea con recursos gráficos o reproducciones digitalizadas) que facilita su mejor conocimiento. Llaman sobre todo la atención el espectáculo digital del juramento de fidelidad a Fernando VII de Borbón como Príncipe de Asturias, las reproducciones holográficas de dos obras (elefante y megaterio) del Museo de Ciencias, así como la recreación del Salón Carlos III de la Aduana de Barcelona, y la decoración del salón dedicado a la guerra contra los ingleses.

 

 

Secciones de la exposición (I)

 

De abogado a ministro de Su Majestad en Roma
A lo largo de la sección vemos como se configura el curriculum político-administrativo de Moñino. Su actuación como fiscal en los sucesos tan importantes como el regalismo, el motín de Esquilache, la expulsión de los jesuitas, y la gestión de temas sociales y religiosos. Por fin, alcanza su consagración en la carrera política al ser nombrado embajador en Roma, donde dirigió la actuación de todos los embajadores de los reinos borbónicos en la actuación de la disolución de la Compañía de Jesús. En la ilustración de esta sección destacan los monumentales retratos de Floridablanca y del Conde de Aranda, junto al bellísimo retrato de Carlos III, obra de Giuseppe Bonito (hacia 1745, imagen superior). Son de un enorme interés las imágenes de propaganda empleadas por unos y otros para lograr sus fines.

El conde de Floridablanca y la Corte
En esta sección se pretende hacer una aproximación al ya secretario de Estado y su relación con Carlos III y después con su hijo Carlos IV. Se abordan distintos aspectos desde la relación personal a la vida en la Corte. Se cierra este apartado con una visión del Madrid que él impulsó de manera determinante. Se inicia esta parte de la muestra con un interesante retrato de Floridablanca, de vivaz expresión. Llama poderosamente la atención la gran estatua ecuestre del monarca Carlos III. Un interesante recurso audiovisual permite hacerse una idea de la jerarquización de los hombres que ostentan el poder del Reino. Las delicadísimas piezas de vajilla del Servicio Ercolanese nos sugiere el aspecto de la mesa del Amo en su representación pública.

La teoría política de un ilustrado
Es esta una de las secciones más complejas. Aunque a lo largo del resto de la muestra se abordan temas monográficos de la actividad política de Floridablanca, aquí se ocupa de algunos temas genéricos del hombre ilustrado, sin olvidarnos de la persona y algunos aspectos de su intimidad. Dirigismo ideológico y proceso identitario de España y los españoles. El empleo de la imprenta y, especialmente, la calcografía para sus campañas ideológicas y su correspondiente divulgación. El busto de mármol de Floridablanca recibe al entrar en el espacio de la sección. Numerosas obras de la Calcografía Nacional ilustran sobre el pensamiento político de nuestro protagonista. El proceso de creación de una estampa introduce en los secretos de la técnica que alcanzó cimas excepcionales bajo el control de Moñino. Entre sus obras personales, son muy atractivas la serie de tipos hispanos realizadas por el Real Gabinete de Piedras Duras.

Los españoles
Aparecen aquí representados los españoles de diferentes clases sociales y sus aficiones. La sección permite contemplar a un simple funcionario o a un actor. Sus aficiones favoritas: teatro, baile, toros, circo o lo más fascinante del momento, la "globomanía". Obras de Tiépolo, González Velázquez, Esteve o Carnicero enseñan de manera atractiva personajes y escenas de marcado sabor costumbrista. Aunque estas fiestas en muchas ocasiones son interclasistas, no faltan las exclusivas de los aristócratas como la "función de parejas" representada de manera excepcional en el manuscrito de Morales Coronel.

Conocimiento de la población y el territorio
Floridablanca sabía que para desarrollar un buen programa de gobierno era necesario conocer el número de sus habitantes y el nombre y la entidad de sus núcleos de población. Surgieron así el Censo, el mejor de la Europa de su siglo, y el Nomenclator. Por otra parte, era necesario contar con una buena cartografía. Vemos aquí todo tipo de mapas, de los de Espinalt a Tomás López. La excepcional obra de Tofiño sobre las costas de España, envidiada por su técnica y representación, también está presente a la vez que un recurso digital acerca al detalle de las representaciones. La información del Censo y del Nomenclator acompañada por la imagen geográfica muestra la Murcia del siglo XVIII.  

 

 
 
Elevación de un globo ante la corte de Carlos IV (Antonio Carnicero)

 

Secciones de la exposición (II)

 

Hacienda
Introducidos por el gran retrato del monarca Carlos III, procedente de la vieja Aduana, entramos en esta sección. Se aborda la creación del Banco de San Carlos, exponiendo la imagen de los protagonistas y la documentación bancaria. Se reflejan las nuevas sedes de aduanas en España y América, entre ellas el proyecto para Cartagena. La Renta del Tabaco, desde la recogida de la planta en el campo hasta los centros de su elaboración. La importancia de esta renta necesitará un fuerte control policiaco para evitar el contrabando, que figura en la exposición con el célebre tapiz de la Real Fábrica, "El Resguardo del Tabaco", según cartón de Francisco de Goya.

La indumentaria y las leyes del lujo
Para la economía, el lujo en el vestir y el amueblamiento suponía un gran costo para la balanza de pagos, preocupación prioritaria del gobierno de Floridablanca. Algunos cuadros nos acercan al lujo y la elegancia de los aristócratas. Junto a estas obras podemos ver lo que se puede considerar la primera revista de moda en España, siguiendo los modelos parisinos: "Muestras de trages y muebles decentes y de buen gusto". La polémica entre Floridablanca y la condesa de Montijo sobre el llamado traje nacional.

Ejército
Un excelente retrato de Carlos III como jefe del ejército está al frente de la información sobre los recursos militares. Tropas, arquitectura militar y armas son mostradas mediante dibujos procedentes de los Archivos Nacionales. No falta ni la información del costo de un cuartel hasta su organización. De enorme interés son las representaciones de los fuertes en América o los fanales costeros.

Asuntos exteriores
La dedicación a la política exterior fue una de las principales actividades de Moñino. En este espacio expositivo se contempla una galería de retratos de embajadores. Para continuar con los testimonios de la documentación recogida por diplomáticos y agentes de información. El material expuesto permite ver la diversidad de materias que interesaba a la Secretaría de Estado (desde el incendio de Constantinopla a los conflictos bélicos, sin olvidarse de los asuntos internos de cada país). En este sentido una parte importante del poder de Floridablanca se fundamentaba en esta información. Sigue un apartado dedicado a los tratados con imágenes en muchos casos expuestas aquí por primera vez. La visión de Constantinopla del viaje de Aristizabal muestra, con todo detalle, la espléndida capital de la Sublime Puerta. Cuadros, dibujos y documentos son distintas estaciones icónicas de la guerra contra los ingleses: Menorca, Gibraltar, el intento de la invasión de Inglaterra, Gálvez y la independencia americana... Esta última cuenta un excepcional hito en el Monumento a George Washington, obra del Real Gabinete de Piedras Duras. Bocetos de Ferro y Castillo acompañan a una reconstrucción ideal del programa iconográfico de lo que iba a ser el antedespacho del Conde de Floridablanca.

Industria
Se ha pretendido dar en este apartado una mera evocación de la industria del momento. El mismo se inicia con el proyecto sobre Almadén de Betancourt encargado por el conde de Floridablanca, para seguir con la minería americana. Proyectos y láminas nos permiten recorrer el incipiente paisaje industrial de la España ilustrada. De las herrerías a los hornos de turba. La industria textil y tintorera. La pasión de Floridablanca y su afición a la producción de la seda. Los astilleros y las embarcaciones.

 

 
 
Hombre con pipa y otras figuras (Lorenzo Tiépolo)

 

Secciones de la exposición (III)

 

Obras públicas
Para que la producción industrial y los frutos de la agricultura rindieran sus beneficios era necesario una importante red viaria. Floridablanca construyó de nuevo más leguas que nadie en el siglo XVIII. Controló sus costos y buscó la forma de mantenerlas en buen estado. Eligió los mejores entre los ingenieros militares y después propiciaría las bases de lo que con el tiempo sería el cuerpo de ingenieros de caminos. El sueño ilustrado de los grandes proyectos de utilidad pública tuvo en él su principal protagonista. El Canal de Aragón o el Proyecto del Segura no son nada más que una mínima parte de todo lo que organizó. Postas y correos fue otra de sus competencias. Cierra la sección el Proyecto de bajeles de la Coruña, pensado para el servicio postal de América.

La ciencia
Las piezas reunidas en esta sección ponen de manifiesto el apoyo prestado a la ciencia. Espionaje científico, captación de cerebros y traducción de los libros científicos ocupan la primera parte de la sección. Hoy día muchos especialistas consideran que lo realizado en Madrid para el desarrollo de la ciencia debería denominarse con mayor precisión "Proyecto científico Carlos III/Floridablanca". El gran paseo de la Ciencia, el "Salón del Prado", el Gabinete de Ciencias Naturales, el Jardín Botánico, el Real Observatorio, etcétera, figuran en la exposición. Las producciones del Gabinete de Ciencias tienen un lugar destacado. El elefante del rey Carlos III y el célebre megaterio cuentan con una interesante representación holográfica. Las industrias del reloj y del piano se hallan representadas con obras muy significativas. Los materiales de observación y óptica comprados por Floridablanca en Londres son numerosos. Una variada representación de curiosidades americanas y materiales procedentes de las grandes expediciones cuentan con un lugar de privilegio. El apoyo de Moñino a la arqueología está representado por los bellos cuadros del Teatro Romano de Sagunto o las piezas de Palenque.

El comercio
Un pequeño boceto del conde de Floridablanca introduce a los visitantes en la política comercial y sus imágenes, así como en las sociedades Económicas y su polifuncionalidad. El programa iconográfico del comercio español representado en la Aduana de Barcelona se reproduce en la muestra mediante una interesante reconstrucción virtual. La política de Floridablanca de promoción de los puertos españoles cuenta con una producción propia, así como un bello cuadro de Luis Paret y Alcázar.

Educación y caridad
Combatir la mendicidad y reconducir el concepto de caridad fue un objetivo del ilustrado conde de Floridablanca. Propiciar el acceso a la educación a las clases más necesitadas fue una de sus principales preocupaciones sociales. La reforma de la universidad propiciando la aprobación del plan Blasco para Valencia permite conocer sus ideas sobre el tema. Posiblemente en esta sección sea en la que contamos con un mayor número de obras de artistas de reconocido prestigio, entre ellas destacan siete magníficos goyas.

Del ocaso a la gloria
La última sección de la exposición está enmarcada por sendos retratos de Carlos IV y María Luisa de Parma. Carlos IV no solo cumple con la voluntad de su padre manteniendo en su cargo a Floridablanca, sino que además le recompensa con el toisón. Las críticas de la oposición y su actitud ante la Revolución Francesa le harán perder el favor regio y será destituido. Le sucederán en el poder Aranda, Godoy, etcétera. Durante un tiempo incluso sufrirá prisión en Pamplona. Cuando Floridablanca estaba olvidado en Murcia prestará un último servicio a la Nación como Presidente de la Suprema Junta Central de España e Indias. El gran cuadro encargado por él a Ferro para presidir el altar de su capilla funeraria cierra la exposición.

 

 
 
Niños peleándose (Goya)

 

Datos de interés

Dirección: Palacio del Almudí (Calle Plano de San Francisco, 8) y Sala Verónicas (Calle Verónicas, 4).

Horarios: lunes a sábado: de 10:00 a 14 y de 17:00 a 21:00 horas; domingos y festivos, de 11:00 a 14:00 horas. Cerrado: 19 de abril (Viernes Santo), 23 de abril (Bando de la Huerta) y 27 de abril (Entierro de la Sardina).

El acceso a la exposición será gratuito y permitido hasta 45 minutos antes del cierre.

Horario de visitas guiadas para escolares y grupos: lunes a viernes, de 10:00 a 11:00 y de 11:30 a 12:30 horas. Grupos: miércoles a las 18:00 horas y domingos a las 12:00 horas (máximo 25 personas).

 

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