LAS AFECCIONES DE LOS ÁNGELES MÚSICOS EN LA CATEDRAL DE VALENCIA

27/11/2019


 

 

La Catedral de Valencia y la dirección general de Patrimonio de la Conselleria de Cultura de la Generalitat Valenciana acordaron iniciar hoy una serie de estudios sobre las afecciones que sufren los frescos renacentistas de los ángeles músicos en la bóveda del altar mayor, ante la aparición de eflorescencias en varios puntos, con el fin de procurar la mejor conservación de estas pinturas realizadas en la segunda mitad del siglo XV por los artistas italianos Francesco Pagano y Paolo de San Leocadio.

El subdirector general de Patrimonio Cultural y Museos de la Conselleria de Cultura, Antonio Bravo, y la directora del Instituto Valenciano de Conservación y Restauración de Bienes Culturales, Gemma Contreras, visitaron el pasado lunes la Catedral de Valencia donde fueron recibidas por el canónigo de conservación del Patrimonio, Jaime Sancho, y el canónigo Archivero, Vicente Pons, así como por el arquitecto titular de la Seo, Salvador Vila y los técnicos que intervinieron en la recuperación de los frescos tras su hallazgo en 2004.

Examinada la situación, se acordó por parte de la Catedral y la dirección general de Patrimonio llevar a cabo un estudio de los posibles agentes que afectan a las pinturas, con un análisis fotográfico de termografía, medición de la humedad, comprobación de la estructura y ventilación para una mejor conservación de los frescos. Los estudios están siendo realizados por la Catedral con la colaboración del Instituto Valenciano de Conservación.

Fue la Societat Valenciana d'Història de l'Art, entidad cívica que tiene como objetivos la defensa del Patrimonio Cultural y ser un nexo de unión entre los historiadores, quien denunció el pasado viernes 22 de noviembre el deterioro que sufrían las pinturas murales en una de sus redes sociales:

 

"Las filtraciones arruinan uno de los ángeles músicos de la Catedral de Valencia. Es un escándalo ver como a lo largo de estos últimos meses uno de los ángeles músicos de la bóveda del presbiterio de la Catedral de València -obra de Paolo da San Leocadio y Francesco Pagano- se está arruinando sin que nadie haga nada. Las filtraciones de agua con las correspondientes salinizaciones y los desprendimientos de la capa pictórica ya han llegado a un grado de deterioro irreversible. Muchos son los responsables de esta desidia que tendría que hacer "rodar cabezas" pero ya sabemos que nadie asumirá la más mínima responsabilidad. Mientras tanto València está perdiendo una de las obras maestras del Renacimiento datada entre los años 1472 y 1481."

 

Otra asociación, el Círculo por la Defensa y la Difusión del Patrimonio Cultural, se ha unido a la denuncia y acusa a la Catedral de Valencia de eludir responsabilidades sobre los daños que se han producido en uno de los ángeles músicos pintado en el ábside del altar mayor:

 

"En lugar de asumir responsabilidades ante la gravedad de lo que ha sucedido y el daño causado a unas pinturas que forman parte de un BIC, la Catedral de Valencia está intentando eludirlas a través de excusas y argumentos a cual más inverosímil."

 

Asimismo, el Círculo por la Defensa y la Difusión del Patrimonio Cultural acusa al arquitecto responsable de las obras de la cubierta y al canónigo de conservación del Patrimonio de mentir en sus declaraciones sobre el estado de conservación de las pinturas, y advierte a la Conselleria de que no puede eludir responsabilidades:

 

"Según Salvador Vila -arquitecto responsable de las obras de la cubierta- es la humedad acumulada en el interior de las paredes "desde hace siglos" y la falta de ventilación -agravada por los fieles y los turistas- las causas de los desperfectos en los ángeles músicos. Tanto Jaime Sancho, presidente de la Comisión Diocesana de Patrimonio Histórico-Artístico, como el citado Salvador Vila, aseguraban ayer al diario Levante-EMV que lo que se ve a simple vista "son eflorescencias pero que no ponen en peligro las pinturas", lo cual no es cierto, puesto que la pintura original afectada está completamente corroída y ya es irrecuperable. También es evidente que hay filtraciones de agua además de la condensación. En todo caso, lo importante es conocer las causas y poner remedio al problema. Tiempo habrá de poner a cada cual a su lugar. Tampoco la Conselleria de Cultura puede ponerse de perfil, puesto que tiene la responsabilidad legal de la tutela sobre un BIC y su actuación tiene que ser inmediata."

 

 

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