Un panel cerámico de mitad del siglo XIX que representa a San Vicente Ferrer, y que fue hallado el pasado mes de julio en Benimodo (Valencia) tras una falsa pared durante unas obras en la fachada de una vivienda privada, ha sido donado por el propietario del inmueble al Ayuntamiento, que lo retirará para su restauración.

Se trata de un hallazgo "que ha sorprendido a todo el pueblo porque, aunque en Benimodo existen otros paneles cerámicos devocionales en varias fachadas, ni Enrique Hereu, propietario de la vivienda donde ha aparecido éste ni sus familiares o las personas mayores de Benimodo sabían de su existencia y, curiosamente, ha sido encontrado en el Año Jubilar Vicentino", ha explicado Paco Teruel, alcalde de la referida localidad.

Asimismo, el Ayuntamiento ha notificado el hallazgo a la Generalitat Valenciana, cuyos técnicos de Patrimonio se desplazarán a Benimodo para su catalogación. A continuación, el catedrático de la Universitat de València (UV) Vicent Guerola se hará cargo de la retirada de los azulejos de fachada para su restauración.

Según las primeras investigaciones, tal como ha confirmado Josep Lluís Cebrián, licenciado en Geografía e Historia y experto en tableros cerámicos, este panel representa a San Vicente Ferrer en el llamado "Milagro de Barcelona", y fue realizado seguramente en torno a 1840-1850 por un artista cuyo nombre se desconoce, conocido popularmente como "Pintor de la Conquesta", autor de otros dos paneles cerámicos dedicados a San Antonio Abad y a Santa Bárbara del total de ocho que, hasta la fecha, conformaban la colección de retablos devocionales de los siglos XVIII y XIX de Benimodo catalogados por la Generalitat Valenciana.

Precisamente fue el propio Ayuntamiento de Benimodo el que instó a los dueños de la vivienda a realizar obras de restauración en la fachada, la cual estaba en malas condiciones, de manera que estuviera reparada de cara a la procesión de Sant Felip que se celebrará mañana viernes.

Durante las obras, el pasado 23 de julio los obreros encontraron una especie de nicho que sonaba hueco, y tras informar al alcalde y a los técnicos municipales, lo retiraron con cuidado y apareció el panel cerámico.

Seguramente el retablo fue tapiado durante la Guerra Civil para evitar su destrucción, y tras su aparición se encuentra en buen estado de conservación aunque tiene algunas piezas rotas y pérdidas de pintura, motivo por el cual se procederá a su restauración, que será acometida una vez finalicen las fiestas patronales.