CLAUDE CAHUN

Ángeles Villalba Salvador


 

 
 

Autorretrato (hacia 1939)

 

La obra de la fotógrafa, artista y escritora francesa Claude Cahun, nacida en Nantes en 1894 y fallecida en la isla de Jersey en 1954, supone uno de los primeros ejemplos de la fotografía del siglo XX en el que se plantea como discurso el cuestionamiento de la propia identidad. Claude Cahun se reinventa a si misma reclamando un lugar situado en el extremo opuesto al rol de musa que sus compañeros del grupo surrealista francés quisieron darle.

Nacida Lucy Schwob en una familia de la alta burguesía intelectual, recibió siendo niña clases de piano y tuvo una institutriz inglesa. Su madre era judía y su padre, Maurice René Schwob, llevaba las riendas de un periódico de Nantes. Debido al clima antisemita en Francia desde el asunto Dreyfus, sus padres la enviaron a estudiar Oxford, en el año 1907, y en 1914 continuó sus estudios en la Sorbonne, al tiempo que mantuvo una intensa vida social en París. Su formación anglosajona la serviría más tarde para su tarea como traductora de textos de Lewis Carroll, de Benjamín Peret y así como del ensayo de Havelock Ellis, de quien tradujo un conocido texto sobre el concepto de "inversión sexual".

Además de un hermano con el que no se llevaba especialmente bien y del que apenas se tienen noticias, se sabe que su madre tuvo que ser internada de por vida por motivo de unas fuertes crisis depresivas. Su padre volvió a casarse y Claude Cahun tuvo otra medio hermana, Suzanne Malherbe, hija de la segunda esposa de su padre, que será la mujer en torno a la que gire toda su vida y que será su pareja hasta el final de sus días. Hermanastras y amantes, Malherbe no solo fue su pareja sino también la compañera fiel en sus episodios políticos y ambas realizaron conjuntamente Aveux non Avenus, raro y bello libro ilustrado con fotomontajes.

De difícil clasificación Claude Cahun produjo en el periodo de entreguerras una importante cantidad de objetos de inspiración surrealista, collages, fotografías y escritos centrados en la búsqueda de su propia identidad sexual, y focalizados en su imagen y su vida. Irónicamente Cahun cayó después de la II Guerra Mundial en la absoluta oscuridad. Incluso fue tan incierta su identidad que por un tiempo no se supo si era hombre o mujer. De hecho la primera investigación académica sobre ella fue un estudio de François Leperlier del año 1992.

Desde 1917 y distanciada de su familia intencionadamente, decidió cambiar su nombre y por tanto su identidad, y adoptó el ambiguo nombre de Claude Cahun. Ambiguo, porque Claude en francés es usado tanto por hombres como por mujeres, y Cahun lo tomó prestado de Leon Cahun, un hermano de su abuela paterna, hombre culto y bibliotecario. Entre 1919 y 1934 Claude Cahun adoptó un aspecto un tanto extravagante pues se teñía el pelo de rosa, de dorado, de verde con reflejos metálicos, se depilaba las cejas y pestañas, se pintaba exageradamente los labios y las mejillas al estilo de los payasos circenses.

A principios de 1920 se instala en París con Suzanne Malherbe, diseñadora gráfica y escritora. Escribió en varios periódicos y en la revista homosexual de vanguardia L´Amitié. En 1925 publicó, en el periódico Mercure de France, siete relatos titulados Heroïnes, y dos más en Le Journal Littéraire. En ellos mostraba diferentes prototipos de mujeres, desde la inocente, la enamorada, la sádica y la andrógina, hasta la lesbiana, la adoradora y la masoquista. En 1934 se unió al grupo anti-fascista Contre-Attaque fundado por Bataille y Breton.

En 1936 participó en la Exposition Surréaliste d´Objets, en la galería de Charles Ratton, y en la Exposition Internationale du Surréalisme, en Londres. La colaboración de Cahun con el grupo surrealista se diferenció de la del resto de mujeres que participaron en el mismo por su entrada en el debate político que el grupo mantuvo con la Internacional Comunista a raíz del enfrentamiento público entre Breton y Aragon.

 

 
     
     

Ilustraciones de Aveux non Avenus (1929-1930)

 

Figura ecléctica por excelencia, Cahun, que nunca busco el reconocimiento público, desarrolló simultáneamente los géneros literario, fotográfico, teatral, los movimientos simbolista, surrealista, activista revolucionario... Y en cada uno de ellos experimentó en diversos frentes: poesía, novela, ensayo, autobiografía y en fotografía: autorretratos, retratos, fotomontajes y puesta en escena de objetos.

En la obra fotográfica de Claude Cahun destacan sus numerosos autorretratos, en los que se produce una multiplicidad del yo y una constante reinvención. Estos, como sus escritos autobiográficos, son un despliegue fabuloso para ahondar en la búsqueda de su propia identidad a través de la pluralidad de imágenes de sí misma. Aunque sus fotografías formalmente no se caracterizaron por la innovación, sus fotomontajes demuestran un conocimiento de las técnicas dadaístas con las falsas simetrías, duplicados e inversiones de imágenes, denominados "en espejo", en los que predominaban la proliferación de cabezas y que asombraron a todos los que las vieron, incluido el propio Man Ray, que por aquellas fechas fue quien ayudó a Duchamp, en el año 1920, a crear su propio y conocidísimo alter ego, Rrose Selavy.

Contemplados en su conjunto los autorretratos de Cahun revelan una clara tendencia hacia la indefinición del género, que también aparece reflejado en uno de sus escritos, el mencionado Aveux non Avenus (1929). Son imágenes que a veces se inclinan más hacia lo femenino: la bañista, la artista de circo, la malabarista de feria, la muñeca con trenzas, la mujer vestida de folklórica con trenzas, la niña dormida, la cabeza de Medusa... Mientras otras se orientan hacia lo masculino: el marino, el dandy, el joven ambiguo, el andrógino... Cahun nos introduce en un ámbito, muy similar al teatral, en el que las apariencias tampoco son lo que parecen.

En sus primeros autorretratos suele representarse como mujer; así en el primero conocido de 1911, aparece con un turbante y un broche en la frente y los labios pintados. En 1914 en Autorretrato (Claude Cahun como Niña) una jovencísima Cahun con veinte años se tapa con una tela blanca hasta la barbilla con el pelo suelto a lo medusa y de factura borrosa. Dos años más tarde, en Autorretrato (Contra una Pared de Granito), (1916) Cahun se ha rapado el pelo y su aspecto cambia radicalmente, la feminidad del anterior se torna ahora hacia el lado masculino de una nueva imagen, que se irá radicalizando con el paso de los años. Pero esa imagen masculinizada se matiza, o mejor se vuelve resbaladiza ya que en otra serie en la que aparece rapada, sin cejas y con chaqueta y pantalón de hombre, al colocar su mano derecha sobre la cadera le da un toque de amaneramiento, con el que volvemos a ese gusto por la indefinición propio de la artista. Aunque su lesbianismo fue declarado, fue como si tratara de abrir una tercera vía en un lugar indeterminado y ambiguo, ni masculino ni femenino, ni tampoco andrógino. Otro ejemplo de esa ambigüedad es una serie de Autorretratos del año 1927 en los que aparece vestida como una especie de boxeadora, con dos rizos perfectamente definidos sobre su frente y dos corazones sobre sus mejillas, contraponiendo roles tales como la fuerza, el músculo o la potencia contra esos otros rasgos femeninos pintados sobre su rostro.

Entre las fotos más impactantes de Cahun encontramos otro autorretrato Sin Título (Cahun, Cabeza afeitada, Hombros Pelados), (1928) en el que aparece de espaldas con camiseta negra de tirantes, girando su cabeza hacia la izquierda, rapada al cero, mostrando en todo su esplendor la forma ovoide de su cráneo , la boca abierta, el ojo pintado de negro. Es una de sus fotos más inquietantes, alejada de la belleza tradicional asociada a la mujer, se muestra aquí como un ser asexuado y androginizado. Continuando con esa reinvención constante de sí misma en el Autorretrato (Con Gato) (hacia 1927) da un giro de ciento ochenta grados y aparece una Cahun muy femenina que sostiene sobre su hombro a un gato que mira desafiantemente a la cámara. En 1929 la imagen masculinizada llega a su cenit en Autorretrato como el Señor en Banieu.

Cahun fue sin duda pionera en ese mundo que gira en torno a la máscara y el travestismo, lugar común para muchos creadores contemporáneos donde la identidad y sus categorías son objeto de debate, y se anticipó más de 60 años a los discursos de artistas como Cindy Sherman, Sarah Lucas, Ana Mendieta o Nan Goldin.

 

 
 

André y Jacqueline Breton (1935)

 

En 1937 Claude Cahun y Suzanne Malherbe abandonaron París y se trasladaron a la Isla de Jersey, donde se compraron una granja en La Roqcquaise, con la herencia que habían recibido ambas. Durante la Segunda Guerra Mundial estas islas fueron la única porción de suelo británico ocupado por Alemania y la pareja se unió a un grupo de jóvenes vinculados a la Resistencia. Aunque la imagen que trasmitió a través de sus obras fue la de la indeterminación y la ambigüedad su postura política ante la guerra que le tocó vivir fue rotundamente nítida. Además de otros factores también debió influir en esa beligerante actitud el hecho de ser nieta de un rabino judío de Frankfurt, y aunque no fue educada en el judaísmo fue plenamente consciente del origen de su familia paterna y de la identidad judía del nombre con el que firmaba, Cahun.

Sin embargo su activismo político comenzó varios años antes de empezar la Segunda Guerra Mundial, fue en 1932 cuando dio un vuelco súbito hacia el surrealismo y la política revolucionaria. Amiga de André Breton desde 1933 comenzó entonces a participar en las actividades del grupo surrealista. En 1934 redactó el folleto Les Paris Sont Ouverts, en el que defendía apasionadamente la autonomía poética representada por Lautremont, Rimbaud y los surrealistas, contra la tentativa de someter el arte a una conformidad burocrática como había hecho Louis Aragon. Y aunque sus comienzos en el grupo fueron difíciles, la publicación de este texto cambió sustancialmente su relación con los surrealistas. A partir de entonces se afianzó su amistad con Breton, Dalí, Peret y Crevel. Su polémico escrito se volvería, en el curso de los años siguientes, la principal referencia de los surrealistas en la controversia sobre las relaciones entre poesía y revolución.

Su activismo político junto a Mahlarbe durante la ocupación alemana de la isla de Jersey tampoco fue al uso, su objetivo era minar psicológicamente la moral de los soldados alemanes. Editaron panfletos, redactados sobre papel de seda en blanco, azul y verde, que metían entre los periódicos o pegaban en los muros o en las vallas de los caminos. Generalmente Cahun tiraba doce copias con carboncillo con su máquina de escribir y los ilustraba con imágenes construidas con letras y signos gráficos, similares a los libros simbolistas de los años veinte. Los documentos llevaban mensajes antimilitaristas y antinazis, que escapaban de la censura como canciones, manifiestos, imágenes o juegos de palabras. Iban firmados por "El soldado desconocido". Incluso llegaron a colocar una pancarta sobre los hombres que morían por Hitler en el altar de una iglesia.

Tras cuatro años de activismo clandestino, en julio de 1944 Cahun y Mahlarbe son descubiertas y detenidas. Camino de la cárcel las dos ingieren una importante cantidad de somníferos, lo que las salvó de ser deportadas a Alemania, ya que tuvieron que ingresarlas en el hospital. En diciembre de 1944 son juzgadas y condenadas a muerte por incitación a la rebelión. Sin embargo con la ayuda del alguacil de la isla son indultadas y reunidas en la misma celda en febrero de 1945, donde permanecieron hasta el mes de mayo en que Jersey fue liberada.

La recopilación y publicación de los escritos de Claude Cahun por Leperlier, en el año 2002, en donde se recoge también la correspondencia con sus amigos Gaston Ferdière y Paul Levy, han permitido conocer los avatares y detalles de esta asombrosa historia de rebeldía y valentía de dos mujeres armadas con una máquina de escribir para luchar contra la estructura implacable del Tercer Reich.

Finalizada la guerra volvió a tomar contacto con los surrealistas en 1953, y aunque tenía la intención de volver a establecerse en París, no pudo recuperarse del trauma físico y moral que supuso su encarcelamiento, y continuó su vida en Jersey con la compañía de Suzanne Malherbe hasta su muerte acaecida en el año 1954.

 

 
     
     
Henri Michaux (1925)
 
Autorretrato (1929)

 

FUENTES: VILLALBA SALVADOR, Ángeles. "El autorretrato como forma de transmutación en la obra
de Claude Cahun", publicado en las Actas del Congreso Internacional Imagen Apariencia, 19-21/11/2008, 2009.

 

Exposición hasta el 5 de febrero de 2012 en La Virreina Centro de la Imagen
(La Rambla, nº 99, Barcelona) Horario: de martes a domingo y los días festivos,
de 10:00 a 20:00 horas; los lunes y los días 25 y 26 de diciembre y 1 de enero, cerrado.

 

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