JOSÉ ANTONIO NAVARRO ARTEAGA

Nacido en Sevilla, en el año 1966. Su precocidad como artista motivó que a los 15 años de edad entrara como aprendiz en el taller del escultor e imaginero Juan Ventura, discípulo de Francisco Buiza Fernández, y que con apenas 20 años abriera obrador propio en el populoso barrio de Triana.

Su estilo, forjado a través de muchos años de intenso trabajo, bebe mayormente de los modelos del maestro cordobés Juan de Mesa y Velasco, figura fundamental de la escuela sevillana, observándose también un influjo del arte del granadino Pedro de Mena y Medrano en varias de sus creaciones marianas.

Las notas de acusado realismo en sus obras, el afán por reproducir escrupulosamente hasta el más nimio detalle anatómico, la concepción de los rostros como auténticos retratos, la singular hinchazón palpebral en los ojos arrasados por el llanto de sus Dolorosas y la efectista teatralidad de sus misterios son marcas del autor que gozan de un enorme éxito entre el público, especialmente el cofrade, hasta el punto de haberse visto el artista con multitud de encargos para las hermandades de penitencia a realizar en un año.

Entre sus creaciones, destacan el colosal grupo de la Exaltación de la Cofradía del Nazareno de León; las figuras del misterio de la Flagelación, a excepción del Cristo, para la sevillana Cofradía de las Cigarreras, que el autor quería realizar en talla completa y acabó, por decisión de la hermandad, labrándolo para vestir; el misterio de la Sagrada Cena para Almería, del que sobresale la magnífica talla del Cristo, o las figuras secundarias del misterio malagueño de la Entrada Triunfal en Jerusalén (La Pollinica), uno de sus primeros encargos.

También son dignos de mención el Nazareno del Divino Perdón y la Virgen del Mayor Dolor, en talla completa, para Sevilla; el Cristo del Silencio para el municipio gaditano de La Línea de la Concepción; el formidable San Juan Evangelista de la sevillana Cofradía de San Vicente, destinado al culto interno, y el misterio de la Coronación de Espinas, también en talla completa, para la Cofradía del Paso Azul de Lorca (Murcia, en la imagen), de una calidad realmente notable tanto en el modelado de las figuras como en las malignas expresiones de los verdugos.

Por último, destacar las figuras del misterio de la Sentencia de Cristo para la Cofradía de la Yedra, de Jerez de la Frontera, la Virgen de la Oliva (Madonna con el Niño de talla completa) de Dos Hermanas (Sevilla), la Inmaculada Concepción del templo homónimo sevillano y, dentro de su también interesante obra civil, el Monumento a la Afición del Betis que ha sido ubicado en la Avenida Ramón de Carande de la capital hispalense.

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