Dolorosa de busto en barro policromado para una colección privada, con todos los grafismos del autor en este tipo de iconografías: belleza idealizada, uso de postizos, gesto expresivo y rasgos naturalistas. Los pliegues inmaculistas son redondeados en su mayoría, no descartando las duras aristas al igual que el dramatismo en el rostro, pero sin alturar la blandura y dulcificación que suelen primar en estas piezas de devoción doméstica.

Entre las creaciones recientes de Miguel Ángel Valverde Jiménez se encuentra una talla de San Juan Evangelista en madera de cedro policromada para vestir, perteneciente a un grupo escultórico (imágenes inferiores) donde tanto la Mater Dolorosa (Virgen de la Misericordia, 2016) como el Cristo Yacente (Santísimo Cristo del Amor y Misericordia, 2014), son obras también del escultor para el templo de San Antonio de Padua de Puertollano.