María Enríquez de Luna (1474-1539) fue la artífice de una verdadera transformación económica, social y cultural en el Ducado de Gandía (Valencia) durante su regencia, en los inicios de la denominada Edad Moderna. Viuda tanto de Pedro Luis de Borja como de su hermano Juan de Borja y Cattanei -I y II duque de Gandía, respectivamente-, consiguió de su suegro, el pontífice Alejandro VI -el famoso Rodrigo de Borja, padre también de Lucrecia-, la bula para erigir el templo parroquial de Santa María de la Asunción en Colegiata.

Una de las principales empresas de María Enríquez de Luna fue la de embellecer la ciudad de Gandía. Para ello contrató a los mejores artistas que se encontraban por aquel entonces en la antigua Corona de Aragón: Pere Compte, arquitecto de la Lonja, fue el encargado de las obras de ampliación de la Colegiata; Damián Forment, escultor, llevó a cabo diversas actuaciones, la mayor de ellas la puerta de poniente o de los apóstoles -cuyas figuras fueron reproducidas entre 2001 y 2004 por Ricardo Rico Tormo-, y el maestro Paolo de San Leocadio, que fue el pintor encargado del grandioso retablo para el altar mayor de la Colegiata, llamado de los Siete Gozos, el cual se hallaba presidido por una efigie mariana de Forment, autor igualmente de la talla del retablo.

Desafortunadamente, no podemos contemplar hoy el esplendor de estos encargos, dado que han desaparecido en avatares históricos como la Guerra Civil, pero en el intento por rendir el homenaje que se merece a María Enríquez de Luna, se ha conseguido reproducir las obras desaparecidas mediante imágenes de archivo, así como exponer diversas obras originales procedentes del Museo de Bellas Artes de Valencia de dos de los artistas que trabajaron para María Enríquez de Luna: Paolo de San Leocadio y Damián Forment.

Todo lo anterior se puede ver en la muestra El esplendor del Ducado (1497-1511). Gandía en la regencia de María Enríquez de Luna (L'esplendor del Ducat (1497-1511). Gandia en la regència de Maria Enríquez de Luna), comisariada por Mar Beltrán y organizada por el Departamento de Cultura del Ayuntamiento de Gandía, actual Capital Cultural Valenciana (CCV). La exposición se integra además en el marco del programa diseñado por el Ayuntamiento gandiense para conmemorar el próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.