Frontal de cultos

Obra realizada en plata de ley en su color, repujada y cincelada con partes sobredoradas, por el orfebre Ramón León Losquiño para la Hermandad de la Esperanza de Triana, con diseño de Francisco Javier Sánchez de los Reyes. Ha sido presentado hoy en la Parroquia de San Jacinto, ante la venerada imagen de la Dolorosa.

El nuevo frontal toma sus trazas del dibujo del intradós, en madera tallada y dorada, del antiguo camarín de la Virgen, obra barroca de mediados del siglo XVIII que fue añadida al magnífico retablo, procedente de Osuna, tallado por Francisco María Ceiba en 1716.

Tiene la particularidad de poder dividirse en cinco partes que presentan tres tamaños diferenciados, lo que lo dota de gran versatilidad a la hora de su uso, ya que puede colocarse por partes o bien de manera completa.

Frontal de cultos

Está compuesto por una zona central más amplia, que junto con los extremos, más estrechos, configura una mesa de altar, quedando por último dos piezas, de algo más de un metro, que pueden usarse como credencias. Los motivos ornamentales aluden al carácter sacramental, marinero y pasionista de la Hermandad de la Esperanza de Triana.

Al igual que las ricas obras de orfebrería barroca mexicana en España, de las que se conservan interesantes ejemplares en El Puerto de Santa María (Cádiz), Villarrasa (Huelva), Tauste (Zaragoza) y Estella (Navarra), reproduce en plata el modelo de las ricas frontaleras que exornaban los altares, como bien han apreciado los historiadores Juan Miguel González Gómez y Manuel Jesús Carrasco Terriza. Unas frontaleras compuestas de diversos tejidos, colores y labores, bordados o pintados, según los tiempos litúrgicos y la categoría de las fiestas.

Con esta nueva pieza se engrandece el aparato de cultos de la popular corporación de penitencia, así como el culto diario de su sede canónica, la Capilla de los Marineros en la calle Pureza, ya que la pieza está diseñada a la medida del banco de altar del retablo desde el que la Virgen de la Esperanza preside su templo.