Antoine Cas

De grandes dimensiones (200 x 150 cm), en el Cartel de la Semana Santa de Huelva 2021, realizado en técnica mixta (óleo, acrílico, pastel y carbón) sobre lienzo, concebido como si de una pieza musical sacra se tratase, tanto por el color, la forma o el ritmo tonal. Su hilo argumental es parecido a un poema. La cruz es un puntal que abraza, recoge y oprime a varias imágenes de la Semana Santa onubense, elegidas por el pintor sevillano, y a modo de corona un INRI omnipresente y vacío. A la derecha, María Santísima, Madre de Gracia, titular de la Cofradía de Santa Cruz. A la izquierda, María Magdalena, perteneciente a la Cofradía de Redención. Ambas obras de Elías Rodríguez Picón arropan, acompañan y confortan a una imagen que en Huelva significar fe, esperanza y fortaleza, Nuestro Padre Jesús Nazareno, una de las obras magistrales de Sebastián Santos. Aparece ataviado con su túnica bordada, las manos atadas y sin la cruz al hombro. Su paso hacia delante, marcado intencionadamente, como metáfora de poder, da al pueblo onubense seguridad y fuerza para atravesar el camino desértico de la pandemia. Los tonos diáfanos, luminosos, poco a poco se envuelven en manchas desordenadas de color rojizos, carmesí y magenta. De entre las tinieblas resaltan los dos ángeles ceroferarios pertenecientes a la Hermandad del Calvario. Todo ello va montado, a modo de altar de culto, sobre un túmulo donde observamos salpicaduras de tonos tierras, sangre, turbios... describiéndose como caos y final. Así, según su autor, "llegamos a la Semana Santa de Huelva, el resultante, el principio y el fin de todo, y de nuevo el comienzo, porque eso es la pasión de Huelva, una ciudad que cada Cuaresma empieza de nuevo para reinventarse en su tradición, en su innovación, en su poderosa ilusión. Espero y deseo que el Nazareno nos lleve a todos de la mano hacia una Cuaresma de esperanza y reflexión; también deseo haber rascado un poco en sus corazones con mi cartel".

Sheila Criado

La obra que ilustra el Cartel de la Semana Santa 2021 de Valencina de la Concepción está realizada sobre tabla, en unas medidas de 80 x 60 cm. Siguiendo la técnica pictórica de la pintura acrílica, con algunos matices sueltos de grafito, su disposición es una composición central prácticamente simétrica. Temáticamente, se representa en una visión central a María Santísima de los Dolores, titular de la Hermandad de Sacramental y de la Vera Cruz de Valencina de la Concepción (Sevilla), en sombras sobre un fondo de damasco del color verde típico de la referida corporación de penitencia. Analizando la obra simbólicamente, la autora representado a la Virgen en primer plano, al pie de la cruz y cercana al fiel, al que espera y escucha, siendo María el eje central de nuestro sustento en los tiempos que corren y la que nos acerca a la cruz. Por eso, y en un plano secundario a modo de sombra de la titular, aparece reflejada la cruz de guía de la Hermandad de la Vera Cruz casi fundida con el fondo de damasco verde. Esta fusión de la titular con la cruz se representa con la intención de hacer alusión a la frase recogida por el evangelista Mateo: "toma mi cruz y sígueme" (Mt 16, 21-27).

Paco Montañés

Tal y como informábamos el pasado 19 de febrero (ver enlace), a raíz de la muestra "La Santa Faz. Una devoción en la Sevilla del siglo XV" y la presentación en su inauguración del Paño de la Verónica 2020-2021 que cada año estrena Nuestro Padre Jesús con la Cruz al Hombro, tras no haber podido ser presentado en la Cuaresma pasada por la situación sanitaria, muestra la particular visión que el versátil artista alcalaíno ha plasmado del rostro de Jesús en el encuentro con la Santa Mujer Verónica. El retrato aparece en su forma más serena y atemporal en la obra, siguiendo el legado de los maestros clásicos del Barroco como Diego Velázquez o Anton van Dyck. Este Paño de la Verónica es un claro ejemplo de la unión entre técnica y emoción al servicio de una idea, la Santa Faz. La hondura y serenidad de este "vero icono" se dirigen a conmover al espectador.