LOS AROMAS DE AL-ANDALUS

18/02/2007

Denominamos al-Andalus al espacio cultural y político hispanoárable que se desarrolló en la península ibérica entre los siglos VIII y XV. El más largo y fructífero encuentro entre el Oriente y el Occidente conocidos en la sociedad medieval. Al-Andalus fue una civilización mestiza, mezcla de razas (árabes, bereberes, hispanorromanos y visigodos) y de religiones (musulmana, cristiana y judía). Su legado más importante es la capacidad que nos ha dejado de admitir como conciudadanos a gentes de distintas costrumbres y religión. La refinada sociedad andalusí fue amante de la naturaleza y de los jardines, de los ambientes perfumados y de los platos aromatizados. Este hedonismo se manifestó muy particularmente en un gusto por el aspecto estético de los objetos y los ambientes.

Como ya venía sucediendo desde hacía siglos, los andalusíes retomaron las rutas de las especias a través de Oriente y el Mediterráneo, favoreciendo el comercio de las mismas y su aplicación en terrenos van dispares como la culinaria, la cosmética y la farmacopea. Tras mil vicisitudes y peripecias, estos viajeros traían estos productos hasta los zocos y los funduq de las ciudades andalusíes, fomentando con ello el crecimiento de la economía. Una gran parte de estas especias y productos, cuyos aromas podemos seguir a través de esta exposición, forman parte aún hoy de nuestra vida cotidiana, de nuestra nostalgia gustativa y olfativa. Muchos otros, sin embargo, se perdieron.

A través de la muestra Los Aromas de al-Andalus, organizada por la Fundación la Caixa y la Fundación de Cultura Islámica, el visitante tendrá la posibilidad de adentrarse en aquellos ambientes de la vida andalusí impregnados por algunos de los más característicos aromas. Así, podrá comprobar a qué olían nuestros zocos, casas y cocinas, mezquitas y jardines, de una manera viva e interactiva.

Hasta el 4 de Marzo de 2007 en el Paseo Marítimo Rafael Ginel Cañamaque de Melilla

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