Se trata de un sayón romano para la Hermandad de la Humildad del municipio onubense de Cortegana. Esta talla en madera policromada forma parte de un grupo escultórico que el escultor viseño se encuentra realizando sobre los Azotes a Cristo en la Columna -el misterio de uno de los tres titulares de dicha corporación- y se completará en los próximos años con las imágenes de un soldado romano y otro sicario.

Sobre este sayón y su boceto les informamos en La Hornacina el 4 de octubre del año 2014, con motivo de la intervención llevada a cabo por Ramón Martín sobre el Cristo de la Humildad, una obra de taller levantino del año 1927. La nueva figura tiene la peculiaridad de no estar en actitud de fustigar, al contrario; ha dejado el tormento por la perplejidad y el asombro de la fortaleza de Jesús, con el que hasta establece un diálogo.