NUEVOS BIENES DE INTERÉS CULTURAL (BIC) PARA MADRID
31/05/2025
El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha aprobado esta semana declarar Bien de Interés Cultural (BIC) los siguientes bienes: la obra pictórica Sansón y el león, de Pedro Pablo Rubens (1577-1640), la iglesia parroquial de La Asunción de Nuestra Señora en Valdemorillo, en la categoría de Monumento, y el yacimiento de la villa romana de La Torrecilla en Perales del Río, en la categoría de Zona Arqueológica. Sansón y el león es un ejemplo de la capacidad creativa de Rubens y un ejemplo de los valores que hacen del pintor alemán uno de los principales maestros del Barroco. Este lienzo se caracteriza por la complejidad de la composición, el estudio anatómico de las figuras, gran dominio del color y de las tonalidades cálidas y la captación de la luz, que se refleja en las figuras. Se logra de este modo una instantánea de gran impacto visual que dirige rápidamente la atención hacia las dos figuras monumentales. Sansón y el león aúna la influencia en las formas heroicas de la Antigüedad Clásica con el realismo de tradición nórdica. El cuadro, que pertenece a una colección privada, se encuentra en buen estado de conservación general, así como el marco de manera tallada y dorada que la protege y la acompaña al menos desde el siglo XIX. La pieza posee una gran relevancia histórica y cultural al haber formado parte de importantes colecciones. En primer lugar, sirvió para decorar el Salón Nuevo del Real Alcázar de Madrid, lo que da cuenta del gusto por el coleccionismo de Felipe IV y las buenas relaciones artísticas con Flandes. Posteriormente perteneció a las colecciones del Marqués de Leganés, en el siglo XVII, y del Infante don Sebastián Gabriel de Borbón, en el siglo XIX. |
El templo de La Asunción de Nuestra Señora en Valdemorillo, de notable interés arquitectónico e histórico, constituye una construcción de estilo tardogótico castellano, relacionada con los talleres abulenses, con fachada de estilo herreriano fechada entre los siglos XV y XVI. Emplea piedra de granito, sobria pero monumental, claramente influenciada por el gótico abulense. Se incluye así en un grupo de iglesias de la zona occidental de la región que limita con la provincia de Ávila, concretamente en la zona sur de la Sierra de Guadarrama, en la que se sitúan también las de Cerceda, Cadalso de los Vidrios, Cenicientos, Navalagamella, Robledo de Chavela y Villa del Prado. Los especialistas atribuyen la cabecera a Juan Campero El Viejo, uno de los maestros destacados de la citada escuela. Además, la construcción del último tramo de la nave y la fachada occidental, con la que se concluye esta iglesia a finales del siglo XVI, corresponde a Bartolomé Elorriaga, uno de los maestros que trabajó en las obras del monasterio de El Escorial. Por su parte, el yacimiento de La Torrecilla fue localizado en 1979 en Perales del Río, Getafe, y desde entonces hasta 1987 fue objeto de excavaciones que se reanudaron en 2016. Corresponde a una hacienda rural de la época romana constituida por estancias residenciales y domésticas, a la que se asocia la necrópolis conocida como El Jardinillo, ubicado a 200 metros. Se trata de una villa de modelo romano típico del Mediterráneo oriental con un patio o "peristilum" central, poco frecuente en la región madrileña. Entre los materiales localizados, de notable importancia, destacan los mosaicos, estucos, losetas de yeso con relieves y decoración floral y geométrica y cerámica en buen estado de conservación. Además, es uno de los pocos yacimientos donde se ha encontrado nácar. Hasta el momento es una de las villas mejor analizadas a nivel científico gracias a un estudio integral llevado a cabo en la década de 1980 que dio lugar a una monografía publicada en el año 2000. |
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