SOROLLA Y ESTADOS UNIDOS

26/09/2014


 

 
 

¡¡Otra Margarita!!

1892
Óleo sobre lienzo
129,5 x 198,1 cm
Mildred Lane Kemper Art Museum

 

Joaquín Sorolla y Bastida (Valencia, 1863 - Cercedilla, Madrid, 1923) es uno de los grandes nombres de la pintura española del siglo XX y una de sus referencias obligadas. Es el creador de una de las imágenes más rotundas y exultantes de la España luminosa y mediterránea, optimista y moderna.

Esta exposición, que puede visitarse desde hoy y hasta el 11 de enero de 2015 en la Sala Recoletos de la Fundación Mapfre, descubre al Sorolla cosmopolita que conquistó el escenario norteamericano, al pintor que supo proyectar el arte español en Estados Unidos, cuyos grandes museos y coleccionistas privados adquirieron buena parte de las obras más destacadas y representativas de la época de plenitud del pintor.

En el año 1909, cuando Sorolla ya había alcanzado todos los grandes premios y honores a los que un pintor español de su época podía aspirar, realiza, con un éxito sin precedentes, su primera exposición en Nueva York; concretamente, en la Hispanic Society of America. Bajo el patrocinio de esta institución, presenta sus obras a continuación en las ciudades de Boston y Búfalo. Dos años después, este mismo triunfo se repite en otras dos ciudades: Chicago y San Luis. Sorolla sedujo a los estadounidenses con sus escenas de playa bañadas por el sol mediterráneo, con sus jardines españoles y sus elegantes retratos.

Construyendo la historia de este extraordinario triunfo, la exposición Sorolla y Estados Unidos muestra unos préstamos excepcionales de instituciones como The Hispanic Society of America, The Metropolitan Museum of Art, Brooklyn Museum, The Morgan Library, Nueva York; Museum of Fine Arts, Boston; The Art Institute of Chicago; Philadelphia Museum of Art, Filadelfia; Mildred Lane Kemper Art Museum, Saint Louis Art Museum, San Luis; Meadows Museum, Dallas; San Diego Museum of Art; The J. Paul Getty Museum, Los Ángeles; Museo Sorolla, Madrid. Presenta al mejor Sorolla, al Sorolla maduro que ha alcanzado las máximas cotas de refinamiento, a la vez que profundiza en la enorme proyección internacional del artista.

 

 
 

Niños a la Orilla del Mar

1903
Óleo sobre lienzo
96,2 x 130,5 cm
Philadelphia Museum of Art

 

Desde los inicios de su carrera, Sorolla se sintió un pintor internacional. La exposición inicia su recorrido mostrando cómo, años antes de la llegada del pintor a Estados Unidos, algunas de sus obras más importantes ya formaban parte de las colecciones norteamericanas. Varias de estas pinturas llegaron de la mano de dealers europeos que adquirieron obra en las exposiciones de París, Múnich, Berlín o Londres. Otras pinturas que habían recibido los máximos galardones en España, no fueron, sin embargo, adquiridas por el Estado español, como era habitual, y encontraron su lugar en Estados Unidos.

La unión entre Sorolla y Archer Milton Huntington, millonario hispanista estadounidense y enamorado de la cultura española, resultó tan indisoluble como crucial para la trayectoria del pintor. Gracias a Huntington, otro magnate norteamericano, Thomas Fortune Ryan, conoció a Sorolla durante la exposición del artista en Nueva York en el año 1909; inmediatamente le encargó numerosas obras. Ryan sentía predilección por las pinturas representativas de la imagen de España y en particular por los jardines andaluces.

Sorolla no se consideró a sí mismo un pintor de retratos, a pesar de la exquisita calidad de los mismos y de la importancia que éstos fueron adquiriendo en el conjunto de su obra. No obstante, el artista era consciente de los grandes beneficios económicos que los retratos de encargo le reportaban. Desde los inicios de su carrera, y especialmente en sus exposiciones estadounidenses, Sorolla presentó numerosos retratos de su familia con el principal afán de publicitar su habilidad en este género y ganarse la confianza de posibles clientes. Estas obras tuvieron un enorme éxito de ventas. Igualmente, en Estados Unidos fueron muy apreciados los retratos que Sorolla consagró a grandes personalidades españolas del mundo de la cultura.

Por otro lado, Sorolla enamoró a los norteamericanos con sus obras sobre el mar y la playa. La exposición cuenta en este apartado con una de las obras maestras de la producción del artista presentada en la exposición del año 1909: Corriendo por la Playa. Por primera vez, se muestran además cuatro grandes estudios preparatorios de este lienzo que han sido localizados en el Brooklyn Museum de Nueva York a raíz de las investigaciones para este proyecto y que vienen a sumarse a otro dibujo ya conocido, también aquí presente.

En la producción de Sorolla, la pintura de paisaje es un género fundamental que va desarrollándose de forma paralela a su consolidación en cuanto artista. Como pintor al aire libre, se identifica con el mar que cambia de forma continua, con la cumbre de la montaña que permanece. La influencia del paisaje regeneracionista, de la mano de su amigo Aureliano de Beruete, confluye en la obra del pintor con la importancia y la significación que cobra el paisaje en la pintura internacional. Así, desde 1906, las vistas de Segovia y Toledo combinan los modernísimos enfoques con la solemnidad de la arquitectura y las calles castellanas.

 

 
 

Idilio entre Flores

1904
Óleo sobre lienzo
93 x 130,5 cm
Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana

 

A partir del año 1908, coincidiendo con sus primeros viajes a Andalucía y con la preparación de sus exposiciones en Estados Unidos, en Sorolla madura, a través de sus pinturas de jardines, una poética del silencio y la intimidad de sorprendentes concomitancias con la sensibilidad simbolista de su tiempo. Hablamos de obras que descubren sobrios rincones llenos de silencio y frescura en los jardines del Alcázar de Sevilla y de la Alhambra de Granada. En estas creaciones, que resultaron fundamentales en las exposiciones del pintor valenciano en Estados Unidos y gozaron de un notable éxito de crítica y venta, Sorolla plasmaba una nueva y sincera imagen de España, bien alejada de los tópicos folcloristas.

De forma paralela a la elaboración de sus grandes lienzos, Sorolla trabajó de forma continua en obras de pequeño formato, realizadas bien como esbozo de cuadros de mayor envergadura, bien por el mero placer de pintar. Según el catálogo de la muestra de 1909 en Nueva York, el pintor exhibió entonces 158 apuntes, cuyo éxito de crítica y económico resultó excepcional. Se exponen en esta ocasión recuperando los marcos específicos que el propio pintor diseñó, consistentes en una moldura dorada con hendiduras paralelas.

Durante sus viajes a Estados Unidos, Sorolla se sintió profundamente sugestionado por detalles diversos de la gran ciudad. En 1911, alojado en el hotel Savoy de Nueva York, pinta una serie de gouaches con vistas sobre la Grand Army Plaza, sobre Central Park y sobre el cruce de la Quinta Avenida con la Calle 59, obras que se presentan conjuntamente, por primera vez, en esta exposición. Se trata de composiciones muy espontáneas, realizadas sobre los cartones que se usaban en la lavandería de los hoteles para doblar las camisas de etiqueta. Muestran la fascinación del pintor por los enfoques contrapicados, inspirados en la altura de los rascacielos y en los que se hace notar la profunda influencia de la fotografía.

Por otra parte, también a lo largo de su estancia de 1911 en Estados Unidos, Sorolla realiza, en el reverso de los menús de los hoteles The Blackstone, en Chicago, y Savoy, en Nueva York, una serie de dibujos a lápiz, algunos con pequeños toques de color, protagonizados por los clientes de los restaurantes de dichos establecimientos. Desde su juventud, Sorolla tenía la costumbre de captar mediante el dibujo, de manera impulsiva, la realidad que le rodeaba, especialmente cuando, fuera de su casa, aprovechaba las comidas para escribir a su familia y a sus amigos, al tiempo que trazaba pequeños croquis. En esas obras estadounidenses, el artista plasma el sofisticado ambiente en el que se mueve. La exposición presenta, por primera vez, una selección de 24 dibujos de la colección del Museo Sorolla, que conserva un total de 138 de este período y características.

 

 
 

Calle 59, Nueva York

1911
Gouache sobre cartón
22 x 43,5 cm
Museo Sorolla de Madrid

 

Dirección y horario: Paseo de Recoletos 23, Madrid. Lunes de, 14:00 a 20:00 horas;
martes a sábado, de 10:00 a 20:00 horas; domingos y festivos, de 11:00 a 19:00 horas.

 

Especial Relacionado en este

 

Volver          Principal

www.lahornacina.com