RIESGO DE DERRUMBE PARA LA IGLESIA DEL MERCADO DE LEÓN

Ana María Suárez (13/01/2007)


 

 

Según informa el rotativo El Mundo, la Iglesia de Santa María del Mercado o del Camino de León se encuentra en avanzado estado de deterioro desde hace varios años. La situación más crítica está localizada en el camarín donde se las condiciones de conservación son nefastas. Algunos factores como la falta de luz y la gran cantidad de humedad agudizan la precariedad de las pinturas.

El arquitecto encargado de clasificar los daños ha dictaminado que se aprecia en las tres paredes exteriores, que el yeso sobre el que asientan las pinturas está abombado. Existen al menos dos grietas en las paredes sur y norte que llegan hasta la cúpula. Además, se observa que las dos pinturas sobre las paredes sur y norte están muy ennegrecidas, probablemente, por el humo de las lámparas. 

Las pinturas centrales presentan pequeñas pérdidas en la mayor parte de las ocho figuras. Por ejemplo, la que representa a Zacarías se encuentra cruzada de lado a lado por una grieta de yeso e Isaías está atravesado, por la misma causa, de arriba a abajo.

La Asociación de vecinos barrio del Mercado ha presentado en el Ayuntamiento de León un escrito para solicitar ayuda y salvar la iglesia. Los residentes estiman que las alteraciones se deben a deformaciones, suciedades, pérdidas de plocromia, grietas, repintes e intervenciones posteriores y cableados de la iluminación. Los miembros de la junta vecinal demuestran su preocupación ante la posibilidad de que se produzca el desplome. Este hecho tendría consecuencias irreversibles para esta iglesia de estilo románico, que es la única que existe en León junto con la de San Isidoro. El escrito presentado cuenta con el apoyo del párroco Enrique García Centeno. El dinero de la subvención estaría destinado a restaurar los problemas en cuatro fases diferenciadas.

El camarín no es la única parte del edificio que necesita una urgente reparación. El acceso a la torre del campanario también requiere actuaciones de restauración. Las escaleras son de piedra y desde que se construyó no se han tocado. Con el pesado paso de los siglos el desgaste se ha hecho latente en cada peldaño. En el último tramo, para llegar a tocar las campanas, los escalones son de tabla de madera a punto de quebrarse. Además, los excrementos de las palomas se amontonan cada nuevo año.

La piedra de la fachada, lamentablemente, no presenta mejores premonociones y se está cayendo poco a poco. Este tipo de sillares se deshace con el simple roce de la mano. Hasta hace diez años se aplicaba tratamiento sobre la superficie y se realizaban los cambios oportunos, pero la Junta de Castilla y León dejó de conceder ayudas en 1995, sin que se conozca el motivo real de dicha decisión. 

Legalmente este edificio está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC). Es decir, es la Junta de Castilla y León la entidad encargada de su restauración. Esta responsabilidad no resta que, al mismo tiempo, puedan recibirse colaboraciones de otras entidades y particulares. 

El conjunto de pintura mural es de estilo barroco y está fechado en el año 1761. La obra fue dispuesta sobre la cúpula y las paredes del camarín que se encuentra detrás del altar mayor. Esta obra consta de un total de ocho figuras de medio cuerpo y de otras de tres cuartos en las cuatro pechinas. En las paredes norte y sur existen representaciones del descubrimiento de la Virgen del Camino que, según cuenta la historia, se apareció, en el siglo XVI, al pastor Alvar Simón. Enfrentada se observa al Cristo en el Monte de los Olivos junto a un ángel que sostiene un cáliz. Por todo el borde que rodea a estas pinturas se puede leer una inscripción que dice «Píntose este camarín siendo rector de esta iglesia Don Manuel Palomino año de 1761»

 

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