Imagen de la Divina Pastora modelada en terracota policromada por Francisco Rovira Yagüe y David Romero Alonso (DAROAL) para una colección privada de Málaga. El pequeño simulacro mide 30 cm de altura.

Pese a que muestra los peculiares rasgos del obrador, resultado de varias influencias escultóricas, se nota en este caso el peso de la escuela sevillana del siglo XVIII, quizás por tratarse de una iconografía nacida en la capital hispalense a raíz de la visión sufrida por Fray Isidoro de Sevilla en el año 1703.

Si bien la fisonomía es completamente diferente y la obra de DAROAL se integra plenamente en el espíritu del Rococó, se advierte cierto recuerdo, tanto en la postura como en los ropajes, de la Divina Pastora que se venera en el municipio sevillano de Cantillana, obra del Setecientos adscrita al círculo de Ruiz Gijón.

En la galería podrán ver más fotografías de una pieza que sigue el estilo usual de la Virgen Pastoreña: sentada sobre una roca, con atuendo pastoril y rodeada de corderos que simbolizan las almas de los cristianos.