Imagen de Cristo Crucificado realizada en terracota y colocada sobre una cruz tallada en madera. El Varón mide 31 cm de altura. La policromía ha sido realizada al óleo a pulimento y patinada.

La obra muestra a un Cristo con la mirada implorante hacia las alturas, en diálogo con el Padre. Se representa tomando impulso para respirar, levantando el cuerpo y apoyándose sobre el clavo de los pies; de esta manera, los brazos quedan bastante paralelos al travesaño. Se ha reforzado esta actitud cerrando los puños.

La anatomía ha sido tratada cuidadosamente por el autor, detallándola y definiéndola teniendo en cuenta las pequeñas dimensiones de la obra. El sudario se ha concebido como un paño pardo-verdoso con amplios pliegues que dejan al descubierto casi la totalidad de la pierna derecha.

La cruz, de corte cilíndrico y sección arbórea, lleva detalles dorados, y el INRI o Titulus Crucis ha sido escrito sobre un pergamino clavado sobre una tablilla que cuelga del madero con una cuerda apoyada en un clavo.