El Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya, a través de la Dirección General del Patrimonio Cultural, ha comprado una tabla del pintor Lluís Borrassà por un importe de 75.000 euros. La tabla, que representa la "Profesión de San Pedro Mártir" y proviene del Retablo de Santa Marta, Santo Domingo y San Pedro Mártir de la capilla de Santa Marta de la Catedral de Barcelona, ha sido adquirida a través de subasta, ejerciendo el derecho de tanteo, en la Sala de Ventas de Barcelona (lote 565).

Después de que técnicos especialistas del Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) examinaran la obra detenidamente, se confirmó que se trataba de una pieza inédita de la última etapa del prolífico taller de Lluís Borrassà. Tanto el estado de la pintura como su notable calidad artística, así como el hecho de que provenga de la Catedral de Barcelona y se atribuya a uno de los pintores más destacados del gótico catalán, han sido unos argumentos determinantes para adquirirla.

Así, la pieza pasa a formar parte de la Colección Nacional de la Generalitat de Catalunya, y será depositada en el MNAC, donde actualmente hay poca representación de este artista gerundense. Una vez se hayan realizado los trámites del tanteo y la pieza se pueda recoger, se expondrá inmediatamente en el MNAC.

La escena representada combina dos acciones simultáneas, sucedidas en dos espacios diferenciados: el interior de una iglesia gótica y su exterior. Adentro, San Pedro Mártir recibe el hábito dominico: está arrodillado y tiene las manos juntas, lleva nimbo y viste la túnica y el escapulario blanco de la orden dominica. Un miembro de la congregación le coloca el hábito y la capa negra ante la mirada de un grupo de frailes predicadores, uno de los cuales sujeta un libro donde se reconoce un fragmento del himno "Veni, Creator Spiritus". En el exterior espera para entrar un grupo formado por cuatro hombres armados, y uno de ellos toca la aldaba. Esta secuencia tiene lugar bajo uno magnifica portada gótica de tímpano flamígero, presidida por un rosetón con tracerías.

La única literatura científica que existe sobre esta pieza es el informe realizado por Alberto Velasco el pasado mes de enero y en el que se establece su autoría, iconografía y procedencia. El estilo pictórico condujo a atribuir la tabla a Lluís Borrassà (Girona, hacia 1380 - Barcelona, hacia 1425), uno de los mejores representantes del gótico internacional en Cataluña, dueño del taller más potente de la Barcelona de inicios del siglo XV. Por otro lado, el tema representado, una escena de la vida de San Pedro Mártir, lo ha identificado como parte del Retablo de Santa Marta, Santo Domingo y San Pedro Mártir de la Catedral de Barcelona.

Según la historiografía, el retablo catedralicio fue construido a instancia del canónigo Guillem Despujol, que en 1414 estipuló, en testamento, su realización. Por lo tanto, la datación de la obra se situaría entre ese año y la fecha de la muerte del pintor, entre 1424-1425, a falta de más documentación.

El estado de conservación de la tabla del dominico San Pedro Mártir, también conocido como San Pedro de Verona, es bueno, a pesar de haber sufrido una restauración en los años 80 del siglo XX en la que se siguieron criterios de reintegración ilusionista. En dicha restauración también se eliminaron algunos clavos de forja y se sustituyeron los largueros originales por unos de nueva fabricación.

Pese al impacto que el paso del tiempo (se han perdido, por ejemplo, las tracerías decorativas) e intervenciones como la anterior han tenido sobre la tabla de Lluís Borrassà, ésta conserva todas las características propias del procedimiento pictórico de la pintura catalana de la época: incisiones en la arquitectura y en los pliegos de la indumentaria oscura, corlado, punzonado, textura pictórica propia de la pintura al temple y veladuras.