El origen de esta exposición está en un proyecto de investigación que arranca de hallazgos realizados en excavaciones urbanas. Un considerable número de piezas cerámicas de pequeño formato, de diversas procedencias y aparecidas en su mayoría en el curso de intervenciones arqueológicas de urgencia pero que también se localizan en museos y colecciones privadas y, lo que es más llamativo, perviven actualmente en la cerámica popular construyen el centro de atención de esta exposición. La cronología de las mismas abarca desde época andalusí hasta nuestros días; por este motivo han sido dos investigadores de reconocido prestigio de la cultura material andalusí, el profesor Guillermo Roselló y la profesora Isabel Flores, quienes han estudiado este material cerámico, al tiempo que han impulsado la organización de la muestra, siendo los comisarios de la misma.
Las figuritas de barro cocido con representación zoomorfa y antropomorfa, bien con silbato o sin éste, así como los juguetitos que reproducen vajillas, tanto islámicas como cristianas, han sido tema tratado por la investigación habitualmente. El hallazgo y posterior investigación de un horno alfarero en Almería conteniendo casi un centenar de dichas piezas, datadas en época cristiana, es la clave sobre la que se apoya el planteamiento previo de la exposición, ya que este horno del siglo XVI o XVII demuestra la pervivencia técnica y formal que permite entroncar los ejemplares islámicos con producciones actuales.
También por primera vez se les dota de sentido histórico y cultural, convirtiéndose en protagonistas exclusivos de una muestra. Resulta significativo como a pesar de los diferentes contextos históricos que han acogido estas producciones, de sus múltiples usos y variada significación se haya mantenido el proceso técnico. Esta pervivencia de tradiciones en la alfarería se hace especialmente atractiva para entender como nuestra cultura material no difiere tanto en algunas ocasiones de las utilizadas hace muchas generaciones e incluso de las que son propias de otras culturas. Todavía hoy, en muchos mercados y ferias de artesanía de las regiones mediterráneas se pueden ver estas piezas y, lo que es mejor, se pueden escuchar a menudo sus sonidos.
El planteamiento expositivo se centra en tres aspectos: Producción o técnica de fabricación de las piezas, a mano o a molde, documentada abundantemente en el horno almeriense; Valoración de los diferentes contextos históricos que las vieron nacer, significación y uso, aspectos religiosos-rituales que encierran, e incluso de los diferentes atuendos, trajes y ornamentos que llevan las figuritas; y Pervivencia, ya que la exposición arranca del mundo andalusí, enlaza con el mundo cristiano para acabar con la pervivencia actual a través de la alfarería popular, presente en ferias y mercados actuales.
Especial atención merece una pieza destacada que representa a la perfección la síntesis del título de la exposición, Del Rito al Juego, se trata de una pieza de Tavira (Portugal) utilizada para las ceremonias matrimoniales.
