El Ayuntamiento de Santoña (Cantabria) insiste en derribar parcialmente uno de los Bienes de Interés Cultural (BIC) de la localidad: el Palacio de Chiloeches-Hospital Militar. Se trata de un edificio barroco del siglo XVIII que ha conocido varios usos: palacio privado construido por el marqués de Chiloeches, oficinas de la Aduana, hospital militar, cárcel y escuela. Actualmente está vacío y en estado de ruina y abandono.

¿Para qué? Para que puedan ser construidos bloques de viviendas de cuatro y cinco alturas y para que Santoña pierda parcialmente uno de sus edificios más valiosos, actualmente de propiedad particular.

¿Cómo? Para hacerlo han de modificar el PGOU de Santoña, y pasarse la Ley de Patrimonio Cultural de Cantabria por donde les apetezca, en connivencia y con vía libre por parte de gobierno cántabro.

¿Qué ganará Santoña? Dos bloques de viviendas de cinco y cuatro alturas en suelo anteriormente protegido dada la relevancia cultural-histórica del inmueble hoy existente. Estos bloques de viviendas quedarán a exactamente diez metros de lo único que quedará en pie del edificio protegido. Lo único que quedará en pie del inmueble protegido legalmente es el cuerpo del Palacio de Chiloeches. Varios artículos de la Ley de Patrimonio Cultural de Cantabria han de ser pasados por alto para permitir esta operación urbanística objetivamente contraria a los intereses de Santoña.

¿Por qué lo hacen? Porque pretenden dar la vuelta a la realidad (destrucción parcial de un BIC santoñés) y van a tratar de convencer a los santoñeses de que lo mejor para el pueblo es que un BIC desaparezca parcialmente, en contra del sentido común y en contra de la ley. Beneficios particulares aparte.

Buciero Vida Salvaje (BVS), cuyo fin es la defensa del patrimonio cultural y el entorno natural de Santoña, anima al pueblo santoñés a que se informe y no se quede de brazos cruzados ante gobernantes que destruyen calculadamente el patrimonio cultural del pueblo (¿es necesario recordar en qué ha consistido la dilapidación de 600.000 euros públicos en el Fuerte del Mazo?).

El Hospital Militar es en su integridad un Bien de Interés Cultural (BIC). La Iglesia de Santa María de Puerto también es BIC. Significa que no pueden ser derribados y cuentan con un entorno de protección. En Santoña los funcionarios municipales y los políticos, todos a una, hacen lo posible para que parte del Hospital Militar se convierta en un bloque de viviendas de hormigón. Un vecino, funcionario de la Casa de Cultura, ha llegado a lanzar el siguiente mensaje: "Por mí que lo tiren entero". La Ley lo impide. Los ciudadanos exigimos que se cumpla la ley. El Ayuntamiento, a defender sus intereses, opuestos a los intereses de Santoña. 

BVS, que va a constituirse como Asociación en breve, anuncia acciones en contra de esta obra, de la cual no se está informando al pueblo de Santoña, y la cual es objetivamente negativa para Santoña, su historia, su patrimonio cultural, y sobre todo, su futuro.

El antiguo Hospital Militar de Santoña, recientemente integrado en la Lista Roja del Patrimonio Español, es BIC en virtud de la Orden de 12 de junio de 1972 del Ministerio de Educación y Ciencia. Dicha declaración no ha sido removida y por tanto, continúa vigente. 

Un inmueble declarado Bien de Interés Cultural (BIC) es inseparable de su entorno. (Artículo 18 de la Ley 16/1985, de 25 de Junio del Patrimonio Histórico Español (BOE de 29 de Junio de 1985).