Este mes de Septiembre de 2017 el Museo Diocesano de Jaca (MDJ, Plaza de la Catedral) elige el espléndido retablo renacentista de la Anunciación de la Virgen, una obra de la década de 1530 procedente de la Catedral de Jaca, como Pieza del Mes. El horario de visitas del museo es de 10:00 a 13:30 horas (también de 16:00 a 19:00 horas, lunes a viernes, y de 16:00 a 20:00 horas los sábados).

Se trata de un retablo realizado en madera dorada y policromada de estilo renacentista plateresco, abigarrado y ya barroquizante, al cual le faltan bastantes de sus elementos, desgraciadamente perdidos a lo largo de los siglos. En el banco, por ejemplo, solo se conserva, en su centro, el grupo en altorrelieve de la Última Cena, mutilado en parte. Los huecos de los casetones que lo flanquean estaban ocupados con las figuras de San Jerónimo, a la izquierda, y San Marcos Evangelista, a la derecha, hoy desaparecidos.

En el cuerpo principal del retablo, distribuido en tres calles de dos pisos y coronamiento, el conjunto escultórico central corresponde a la Anunciación, de bulto redondo, en gran hornacina avenerada. Se halla formado por las figuras de María y el arcángel Gabriel acompañados del Espíritu Santo en forma de paloma. Corona la escena un delicioso tondo que muestra a la Virgen con el Niño, de acusado carácter florentino.

En la calle lateral izquierda, el piso inferior perdió su talla original, sustituida hoy por una imagen dieciochesca de San Agustín añadida posteriormente, de factura popular, menor tamaño que el resto y diferente estilo. En el piso superior hay un San Miguel Arcángel luchando con el demonio, aunque ha perdido su lanza, de la época del retablo. En la calle lateral derecha, en el piso inferior, hay una talla de San Juan Bautista y, en el superior, otra talla de San Juan Evangelista, ambas originales.

Culminando el conjunto, en el ático se sitúa la escena del Calvario, del que solamente se conservan originales las tallas de la Virgen María y Juan Evangelista al pie de la cruz. El grupo está flanqueado por dos medallones con las imágenes de San Pedro y San Pablo.

Este retablo ha sido atribuido, con razones bien argumentadas, al imaginero y mazonero jaqués Pedro Lasaosa, documentado entre 1527 y 1547. Este prolífico artista del Alto Aragón es conocido por su participación en la decoración del Ayuntamiento de Jaca y por haber realizado los retablos de las iglesias de Fago, Montmesa y, muy probablemente, el de Sinués, todos ellos en la provincia de Huesca.

Pedro Lasaosa fue discípulo y aprendiz directo de otro gran artista, Juan de Moreto, maestro florentino que realizó la capilla de San Miguel de la Catedral de Jaca a partir de 1520, y de quien se inspiraría para la elaboración de sus propias mazonerías. Lasaosa, junto con Moreto y el artista Miguel de Peñaranda, constituiría una sociedad para la producción retablística en varias poblaciones del entorno aragonés (Alquézar, Alcañiz, Belchite, Colungo, Mora, Sallent de Gállego y Zaragoza).

Uno de los motivos de la elección de esta pieza es que el próximo 29 de Septiembre se celebra la festividad de los santos arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael, dos de los cuales aparecen en este retablo: San Miguel, cuyo nombre significa "¿Quién como Dios?", es el encargado de luchar contra el mal, y San Gabriel, el "Guerrero de Dios", es su mensajero, conocido por explicar sus visiones a Daniel y la profecía de Jeremías, el anuncio del embarazo de Isabel a su marido Zacarías y, por encima de todo, la Anunciación a la Virgen de la venida de Jesús.